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Los datos biográficos del excepcional escritor mexicano del Siglo XIX, que se reproducirán líneas adelante, fueron extraídos del prólogo que el crítico literario Antonio Acevedo Escobedo –Aguascalientes, 1909 - Ciudad de México (CDMX), 1985– incluyó en su compilación Aires de México, en la que reunió los textos de mayor jerarquía que el autor guerrerense escribió en prosa a través de géneros como la novela, crítica literaria, crónica periodística, oratoria parlamentaria y escritura postal.
Altamirano nació el 13 de noviembre de 1834 en Tixtla, Guerrero; a los 15 años, en 1839, ingresó al Instituto Científico y Literario de Toluca (ICL), donde efectuó sus estudios básicos y preparatorianos e inició la carrera de abogado. Ahí fue bibliotecario, descubrió su vocación por las letras, conoció a su maestro Ignacio Ramírez y, en un periodo vacacional, se integró a una compañía teatral de “Cómicos de la legua”, con la que recorrió la región central de la República Mexicana.
En 1854, ya inscrito en el Colegio de Letrán de la CDMX, se sumó a las filas de la Revolución de Ayutla, que sepultó la dictadura militar de Antonio López de Santa Anna, en cuyas batallas se reveló como un soldado de valor temerario y alcanzó el grado de coronel después de participar en dos contiendas militares más: la Guerra de Reforma (1858-62) y la Intervención Francesa (1863-1867). En 1861 fue electo por primera vez diputado federal y en 1867, con Ignacio Ramírez y Guillermo Prieto, fundó la revista literaria El Correo de México.
A partir de los 33 años, sobre sus hombros pesaron más las letras que los galones y Altamirano emprendió una de las carreras literarias más fructíferas del Siglo XIX, pues fundó otras tres revistas –El Renacimiento (1869), El Federalista (1971) y La Tribuna (1875)– y dirigió La República (1880), de contenido político; escribió cuatro novelas –Clemencia, Navidad en las Montañas, El Zarco (póstuma) y Atenea (inconclusa)–; un libro de crónicas (Paisajes y leyendas), dos poemarios (Rimas e Idilios y Elegías) y las biografías de Miguel Hidalgo e Ignacio Ramírez.
En 1889 fue designado Cónsul General de México en España; en 1890 desempeñó el mismo cargo en París, Francia; y el 13 de febrero de 1893 estuvo al frente del consulado mexicano en Italia, muriendo en la ciudad de San Remo. En 1934, el Congreso de la Unión le rindió un homenaje póstumo con ocasión del centenario de su nacimiento; sus cenizas fueron depositadas en la Rotonda de los Hombres Ilustres. La cultura mexicana –incluidos su folklor, usos y costumbres populares– son los rasgos ideológicos con mayor presencia en su obra literaria.
El dios griego de los pastores y rebaños era representado con la figura de un hombre salvaje que tenía los pies de cabra.
En la escena final de este relato, indígenas mayas abren un boquete en el casco de la galera francesa El Lafontaine, evitan su venta como esclavos en Cuba y dilucidan, asimismo, el título de la novela.
Es una relación detallada de los ilícitos de mayor dimensión cometidos por la burocracia más cercana al expresidente de Argentina, Carlos Menem.
Un modelo delictivo gringo de exportación universal.
Los hechos en los que se vio envuelto Ficarra se suscitaron entre 1946 y 1957, cuando el Vaticano era liderado por el papa Pío XII.
Altamirano nació el 13 de noviembre de 1834 en Tixtla, Guerrero.
Es una obra construida a modo de diario.
Jack Shaftoe vivió su infancia en uno de los barrios pobres del Puente de Londres.
Escribió una veintena de novelas: Cimarrón (1930), la más celebrada; varias obras de teatro y guiones de cinematografía. Fue también reportera de la agencia de noticias AP (Associated Press).
El título de esta colección de cuentos es el mismo de uno de los más de 100 relatos cortos que escribió Héctor Hugh Munro.
Este libro es la confesión autobiográfica de un joven intelectual que a la edad de 30 años se obstina en buscar en Argentina un vínculo de identidad nacional “nuevo” y distinto al que los migrantes de varios países de Europa.
Los precursores literarios del Rey de la Selva.
Florence y Edward se conocieron en un mitin contra las armas nucleares organizado en Londres en 1961.
La historia está ubicada en la segunda mitad del Siglo XX y su desenlace se da un día en el que Franck y A viajan al puerto mayor del país para hacer compras y perecen en un accidente automovilístico mientras retornan a casa.
Claudio Beaumont era un hábil creador de eslóganes publicitarios, fantasioso “hombre invisible” y descubridor de “tesoros ocultos”, hasta que la noticia sobre el secuestro de una anciana en un barrio de París lo motivó a enriquecerse.
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Escrito por Ángel Trejo Raygadas
Periodista y escritor.