Vivir acorde con la naturaleza
Cargando, por favor espere...
Durante los últimos años, las sociedades han prestado mucha atención a la naturaleza. Esta revaloración, en parte, se explica por los cambios drásticos que los ecosistemas sufren debido a la transformación humana en ellos. Sin embargo, creo que es difícil pensar en alguna sociedad que no haya reflexionado acerca de la relación que quiere construir con la naturaleza, básicamente porque se trata de algo que requerimos para nuestra existencia. Desde los primeros vestigios que tenemos de los primeros asentamientos humanos hasta los debates sobre la Inteligencia Artificial, la naturaleza siempre está presente, como protagonista o en el fondo, pero siempre está ahí.
También está presente en los debates de los primeros utopistas. Ciertamente, para Moro, Bacon o Locke, lo más importante era proponer nuevas formas para mejorar las relaciones entre las personas, que contribuyeran a que el desarrollo humano fuera más completo y justo; sin embargo, una reflexión profunda sobre las relaciones humanas implica también la reflexión sobre la relación con la naturaleza, básicamente porque todo lo que, como sociedad, hagamos depende de si nuestras condiciones materiales lo permiten y de qué debería hacerse para que lo permitieran.
Así, en la Utopía de Moro puede encontrarse una propuesta en donde la nueva sociedad tiene a la naturaleza como modelo y límite de su propio comportamiento. Siguiendo el principio estoico de que la mejor forma de actuar es hacerlo acorde con la naturaleza, Moro también propone que el límite del trabajo, consumo y distribución depende de lo que efectivamente sea necesario para el bienestar humano. Al no ser la naturaleza la cuestión principal de Utopía, no hay en este texto una explicación detallada de qué es lo naturalmente necesario, como sí la hay dentro del estoicismo; sin embargo, al proponer esta pauta como límite, Moro ofrece una respuesta al incipiente problema de la desigual distribución y el sobreconsumo capitalistas. Buscar respuestas en el pasado fue la alternativa que encontró para responder a un problema en desarrollo.
Bacon, el gran fundador de la ciencia moderna, fue también un utópico. En Nueva Atlántida describe una sociedad ideal en donde el desarrollo y la cotidianeidad de ésta están regulados por el avance científico, que corre a cargo de una sociedad llamada la “Casa de Salomón”. Los miembros de esta casa se encargan de recolectar los avances científicos hechos por otras naciones, experimentan con ellos y buscan formas en que puedan ser útiles para la vida cotidiana. Gracias a la ciencia, las relaciones humanas de esa isla funcionan correctamente, pero el lugar que ocupa la naturaleza en esta propuesta utópica es totalmente pasivo: la naturaleza fue producida por Dios para que el ser humano la dominara y usara a su conveniencia. El ideal no es, por tanto, seguir las pautas de la naturaleza para frenar nuestros apetitos e impulsos, sino someter la naturaleza a nuestros deseos y sacar de ella el mayor provecho posible.
Aunque Locke no sea reconocido dentro de la pléyade de socialistas utópicos tradicionales, su propuesta del estado de naturaleza (un supuesto momento previo a la formación de las instituciones que rigen a las sociedades) tiene algunos tintes utópicos. Locke cree que en la base de la vida social está el derecho a la satisfacción de las necesidades, por lo que todas las personas deben tener un pedazo de tierra para trabajarla y, así, poder sostener a sus familias y a sí mismas. La naturaleza, para Locke, era un regalo divino para la manutención del ser humano, así que era deber de las personas usarla adecuadamente, pues un desperdicio de los productos de la tierra implicaría una ofensa a Dios.
Como puede verse, las reflexiones sobre cómo las sociedades deben relacionarse con la naturaleza están presentes, aunque no sean las protagonistas del relato. Considerando que la relación que los seres humanos hemos construido con nuestro entorno es uno de los temas más importantes en el capitalismo, vale la pena echar la vista atrás para reconocer cómo ha evolucionado la concepción que tenemos de esta relación y qué podemos recuperar de esas etapas para construir las alternativas del futuro.
Vivir acorde con la naturaleza
Es necesario aprender críticamente de lo que leemos.
La auténtica tradición política en favor de los sectores oprimidos y explotados no es relativista.
. Todo lo que conocemos algún día no será, o mejor dicho, se transformará de alguna forma, se moverá hacia otro punto, se negará a sí mismo porque dejará de ser lo que ahora es para pasar a ser otra cosa.
En la Rusia zarista del Siglo XIX, el acceso al conocimiento era privilegio de unos pocos.
A diferencia de la obra magna de Marx, el Manifiesto pretende penetrar como daga en la carne del capital. Busca ser un arma en manos del proletariado; una herramienta de combate y no una explicación holística de la vida y el hombre.
Una de las características del tiempo en el que vivimos actualmente es la globalización.
Son importantes. Las fábulas que aquí se desarrollan son muestra de una literatura profunda, que busca no sólo enseñar moral, sino que la gente reflexione sobre otro tipo de problemas.
En este recorrido por la historia de la filosofía griega se advierte que el primer atisbo de reflexión genérica sobre el origen y modo de ser del universo, la Tierra y el hombre.
Nuestras percepciones sobre el entorno y el lugar que ocupamos en él se construyen, en gran medida, a partir del “sentido común”.
La prostitución forzada es una de las formas más visibles y lacerantes del tráfico de personas, aunque existen diez modalidades más.
La historia de los movimientos sociales que luchan por mejorar las condiciones de vida del género humano es amplia
Anatole France (1844-1924) fue un escritor francés. Era prolijo en los temas sobre los que escribía, como en la forma de tratarlos.
Después de más de un sexenio de Morena en el poder político, el tiempo ha demostrado que sus acciones no difieren sustancialmente de las mostradas por administraciones anteriores.
La educación es uno de los procesos que contribuyen a que las personas se formen como seres humanos y como seres sociales y políticos.
De aliado a apestado: Sheinbaum pidió el voto para Chema Tapia en 2024; hoy lo desconoce
Acuerdo con refresquera redefine impuesto para 2026
INE propone modelo integral para prevenir la violencia política contra las mujeres
México se queda sin empresas y empleos formales, alerta ITESO
Trabajadores de la UACh van a paro tras explosión en comedor
Escrito por Jenny Acosta
Maestra en Filosofía por la Universidad Autónoma Metropolitana.