Cargando, por favor espere...

¿Es buena o mala la ciencia? La ciencia en la OTAN
La ciencia no es buena ni mala en sí misma, es una herramienta que puede utilizarse de distintas maneras y con distintos propósitos; puede resolver problemas, pero también puede crearlos.
Cargando...

La investigación científica ha sido esencial para cumplir los objetivos militares y expansionistas de la OTAN. En sus orígenes, centraron la investigación científica en el sector aeroespacial para garantizar la superioridad aérea después de que la Unión Soviética lanzara los primeros satélites artificiales de la Tierra –Sputnik 1 y Sputnik 2– en 1957. Con el paso del tiempo, esta agrupación se ha hecho de un sólido cuerpo de científicos e instituciones. Gran parte de su investigación se lleva a cabo a través de la Organización para la Ciencia y la Tecnología (STO), una red de más de seis mil científicos de universidades y laboratorios nacionales y de la industria. La STO también tiene su propio laboratorio de investigación, el Centro de Investigación y Experimentación Marítima (CMRE) de La Spezia (Italia). “Queremos asegurarnos de que podemos proporcionar asesoramiento científico a las naciones de la OTAN para que puedan mantener una ventaja técnica y militar”, dijo Bryan Wells, químico y jefe científico de la organización para la nota de Natasha Gilbert publicada en la revista Nature.

La OTAN invierte en becas y financiamiento para estudios en áreas como la “lucha antiterrorista” y la “ciberdefensa”, según el vocabulario empleado por ellos y sus científicos. A principios de este mes, han actualizado sus prioridades. ¿Qué tipo de investigación está haciendo la OTAN? Tiene proyectos de vigilancia submarina para la búsqueda e identificación de minas, seguimiento e identificación de submarinos, radares, y también tiene proyectos de biología sintética. Por ejemplo, uno de sus programas explora cómo los vehículos submarinos pueden identificar submarinos utilizando tecnologías cuánticas e inteligencia artificial. La OTAN está estudiando cómo la inteligencia artificial podría afectar la capacidad de las tropas para ocultarse y evitar ser detectadas. Otra iniciativa investiga cómo la biotecnología podría aumentar el rendimiento de los soldados mejorando el microbioma (conjunto de microorganismos, como las bacterias, que tenemos en el intestino, cavidades y en la piel) o mediante tecnologías de interfaz cerebro-ordenador, como el desarrollo de dispositivos que traducen las señales cerebrales en órdenes que pueden ser ejecutadas por un ordenador u otra máquina.

Pero la OTAN también está interesada en el cambio climático. El deshielo del mar crea más rutas para la navegación naval en el Ártico, y los países miembros y no miembros de la OTAN operan cada vez más en la región. También les interesa cómo las temperaturas pueden afectar sus instalaciones militares. En un artículo publicado este año en la revista Texas National Security Review, los investigadores del CMRE –junto con colegas de la Universidad de St Andrews (Reino Unido), la Universidad de L’Aquila (Italia) y el Instituto Federal Suizo de Tecnología de Zúrich– descubrieron que los submarinos podrían resultar más difíciles de detectar mediante sonar en el Océano Atlántico Norte a medida que aumenta la temperatura del agua. Otros proyectos exploran el uso de nuevos materiales para elaborar ropa militar eficiente en climas más calurosos.

El equipo de científicos, que crece conforme más países se integran a la OTAN, presenta sus temas de investigación con objetivos de “defensa” y seguridad. Pero dejando a un lado la ingenuidad y partiendo de la historia y realidad materialista, la “lucha antiterrorista” y la “ciberdefensa” se han traducido en participación terrorista y en ciberataques. La ciencia no es buena ni mala en sí misma, es una herramienta que puede utilizarse de distintas maneras y con distintos propósitos; puede resolver problemas, pero también puede crearlos; y hay muchos ejemplos al respecto. Su carácter depende, en última instancia, no tanto de quien la hace (científicos), sino de quien la financia, para qué la financia y la utiliza. He conocido científicos cuya investigación es financiada por instituciones privadas o de seguridad que no pueden hablar de sus resultados ni publicarlos; sólo pueden publicar aquello que los financiadores aprueban. Algunos de ellos incluso se frustran porque las soluciones que ellos vislumbran a partir de sus investigaciones no coinciden con los intereses económicos y políticos de quien financia y son, por tanto, desechadas. Es decir, en la actualidad y en gran medida, la ciencia está guiada por los intereses del poder económico. 


Escrito por Citlali Aguirre Salcedo

investigadora


Notas relacionadas

Mientras el trabajo matemático tiene reglas, axiomas, y su libertad está en función de estar gobernado por sistemas formales; en el trabajo filosófico...

Blade Runner no es una cinta más de ciencia ficción: es un filme que mueve a la reflexión.

Los médicos podrían comenzar a recibir la vacuna a finales de mes, dijo la viceprimera ministra, Tatyana Golikova, en la reunión.

El movimiento pedagógico “matemática moderna”, de los años 50-60 del s. XX, trajo consecuencias funestas en la educación; por ello, en los años 70, matemáticos como Morris Kline, escribieron este libro que a nuestro juicio tiene actual vigencia.

La irracionalidad ayuda al hombre a comprender la continuidad y la discontinuidad de la materia.

En los últimos 400 mil años, la concentración de CO2 atmosférico varió de 180 a 300 ppm

Las siete mil 700 millones de personas que hay en la Tierra, aunado al actual modelo de vida consumista y desenfrenado, aceleran las condiciones de cambio climático que estamos enfrentando, como el calor y el frío.

La lucha por el control de los datos personales se traduce en la posibilidad de poder económico, político e ideológico. De manera permanente somos vigilados por empresas y funcionarios.

Las muertes por sobredosis de fentanilo alcanzaron otro récord en EE. UU. En sólo un año (2021-2022) casi 109 mil personas perdieron la vida por consumir esta sustancia.

Monitorear la evolución del rendimiento deportivo de los atletas a lo largo de las fases de preparación para una competencia es un tema que ha tomado relevancia en los últimos años, sin embargo, no todos los deportistas tienen las herramientas necesarias para realizarla con eficacia.

El Meteorito de Allende abrió “una ventana para entender el origen del Sistema Solar” y junto a otro célebre meteorito “mexicano” de hace 66 millones de años en el área submarina de Chicxulub, ha aportado importantes conocimientos científicos sobre la historia de la Tierra.

Por primera vez en el mundo, científicos de Siberia lograron curar del cáncer a gatos y perros a través de una terapia basada en la captura de neutrones por el boro.

Las consecuencias del calentamiento global antropogénico están ocurriendo con una rapidez mayor a la pronosticada por la comunidad científica.

La investigación de Legendre se caracterizó por materializarse en la publicación de libros importantes para la enseñanza, entre las que destacan Elementos de geometría (1794) y Ensayos sobre la teoría de números (1798).

Muchas de las enfermedades “del mundo moderno” (cáncer, diabetes, hipertensión, asma, demencia) son producto de los “malos hábitos” alimenticios y falta de ejercicio.

Edición impresa

Editorial

El verdadero culpable del atentado contra Trump


La venta de armamento es un fructífero negocio; las más perfectas y mortíferas armas dejan fabulosas ganancias a los capitalistas.

Sociedad anónima

Sociedad anónima 1143