Cargando, por favor espere...

Lucía Sánchez Saornil: poetisa, feminista y revolucionaria española
Su obra no no tiene hoy la difusión que merece; sobre ella se cierne esa conjura del silencio que siempre ha intentado acallar a quienes contradicen el ideario y la tradición dominantes.
Cargando...

La obra de Lucía Sánchez Saornil (Madrid, 13 de diciembre de 1895–Valencia, dos de junio de 1970) militante anarcosindicalista y pionera del feminismo en su patria, no tiene hoy la difusión que merece; sobre ella se cierne esa conjura del silencio que siempre ha intentado acallar a quienes contradicen el ideario y la tradición dominantes. Considerada la única poetisa ultraísta española, figura entre los firmantes del Manifiesto ultraísta, aparecido en 1919 en la revista Cervantes, aunque posteriormente escasos antologistas recojan su obra.

Habiendo nacido en el seno de una familia obrera, su primer acercamiento a las letras fue autodidacta; a los 16 años entró a trabajar como telefonista a la par que cursaba estudios  en la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando, donde estableció relación con la vanguardia literaria de la época. Sus primeros versos aparecieron en 1918 en la revista Los Quijotes, colaborando en publicaciones como TablerosPlural, y Manantial.

Comenzó firmando sus escritos con el seudónimo masculino de Luciano de San-Saor. La evolución de sus posiciones feministas puede observarse en los artículos aparecidos en Tierra y LibertadLa Revista BlancaSolidaridad Obrera. Vivió y escribió en un mundo en el que el papel de las mujeres estaba circunscrito al ámbito doméstico, lejos de la actividad profesional y de las lides políticas.

Fue cofundadora en 1936 de Mujeres Libres, seccion femenina de la anarquista Confederación Nacional del Trabajo (CNT), que llegó a aglutinar a más de 20 mil mujeres; y posteriormente editora y redactora de Mujeres libres, la revista de dicha organización, en cuyo número 12, de mayo de 1938, aparecía Himno de mujeres libresde su autoría, grito de combate para las mujeres de su generación. Ese mismo año, Lucía Sánchez se hacía cargo de la secretaría general de la sección española de Solidaridad Internacional Antifascista (S.I.A).

 

Puño en alto mujeres de Iberia,

hacia horizontes preñados de luz

por rutas ardientes,

los pies en la tierra,

la frente en lo azul.

Afirmando promesas de vida

desafiemos la tradición;

modelemos la arcilla caliente

de un mundo nacido

del dolor.

Que el pasado se hunda en la nada.

¡Qué nos importa el ayer!

Queremos escribir de nuevo

la palabra Mujer.

Adelante, mujeres del mundo,

con el puño elevado al azul.

Por rutas ardientes.

¡Adelante,

de cara a la luz!

 

Sus posiciones, adelantadas a su tiempo, no podían sino hallar rechazo no sólo entre las filas enemigas: conocida es la polémica que sostuvo en las páginas de Solidaridad obrera con dirigentes destacados del anarquismo a quienes criticó en seis artículos bajo el título La cuestión femenina en nuestros medios por mantener prejuicios machistas y una actitud personal contradictoria en torno a la participación de la mujer en la actividad política; a esta serie pertenece Las mujeres, ellas también lo dieron todo(1937), sobre la contribución de las mujeres y su heroicidad en la labor revolucionaria durante la Guerra Civil.

“El 19 de Julio la mujer, desatada, se recobró a sí misma; y ya no quiso volver a perderse (…) Aquellos días, tragándose las lágrimas, aprendió el valor de la acción y actuó; actuó heroicamente en los frentes y en las retaguardias. Fundó hospitales, socorrió a los niños, enjugó lágrimas y dulcificó heridas; recompuso la carne desgarrada y exaltó a los combatientes con el ejemplo de su debilidad, convertida en audacia. Dio sus sonrisas, su solicitud, su amor y su odio −también su odio− a todo, y su sangre. Sí, su sangre; no a través del hijo como otras veces, sino su sangre misma, la que corría por sus venas y que calentaba sus entrañas. La mujer española, ignorante y tímida, superó todas las gestas femeninas de la historia. No fueron ya casos aislados de María Pita, Agustina de Aragón, Marianita Pineda: fueron legiones; en los frentes y en la retaguardia, en las trincheras de las líneas de fuego y en las trincheras de las calles ciudadanas. Cayeron allá con su ardor, con su intrepidez, con su piedad sublimada, y cayeron acá con su serenidad y su estoicismo (…) Nombres de mujer ante los que se quebrarán todas las agudezas de la ironía; nombres de pobres mártires que serán, como los de la Libertaria y Encarnación Giménez, el baldón más negro en la frente de nuestros enemigos. Fueron más que madres, hermanas y compañeras; fueron sencillamente mujeres; afirmaciones de una conciencia recién nacida, anuncio de un potencial de realizaciones incalculables. Algún día desenterraremos estas muertas queridas para escribir en la Historia sus nombres gloriosos”.


Escrito por Tania Zapata Ortega

Correctora de estilo y editora.


Notas relacionadas

Su poesía, en contraste con el realismo y el modernismo de 1950, expresa la belleza eterna y delicada de la naturaleza y la dignidad escondida en la vida corriente de la gente humilde por medio de la lírica tradicional coreana.

Escritor autodidacta, su poesía, cuyo motivo central es la ocupación israelí, goza de gran popularidad especialmente entre los árabes-israelíes y en los territorios ocupados.

La bacteria P. luminiscens actuó sobre las heridas de los soldados como un como un antibiótico muy eficaz, lo que explica por qué las heridas fluorescentes sanaban más rápido que las heridas sin la bacteria fluorescente. Seguramente, esta bacteria salvó la vida de varios soldados, ¿cómo pasó?

El satélite terrestre, con toda su belleza y misterio, ha sido fuente de incontables mitos.

Poeta palestino nacido en Boquai’a, de la alta Galilea, una aldea que no está reconocida oficialmente.

El documental narra la lucha feminista y de sectores progresistas de España en contra de la injusticia contra cinco jóvenes sevillanos que habrían violado a una mujer de 18 años en un portal.

“¡La gente se extraña cuando entiende la poesía! Es un prejuicio: se piensa que la poesía es incomprensible [...] yo pertenezco a la zona de la poesía-que-se-entiende”, sostiene el poeta, periodista y crítico argentino Eduardo Ángel Romano.

Nacida en 1936, palestina de Nablus exiliada en Irak, donde se licencia. Entre sus obras más destacadas está Canciones palestinas, en cuyos versos se dirige al pueblo palestino y a la humanidad.

Se celebra porque el nueve de mayo de 1945, cuando amanecía en Moscú, el mariscal nazi Wilhelm Keitel firmó en Berlín la rendición incondicional de la Alemania Nazi ante Gueorgui Zhúkov, mariscal del Ejército Rojo.

El tránsito hacia una matemática filosófica exige iniciar una quinta revolución matemática; para ello, el estudio de la historia desde el hacer de un matemático es fundamental.

Daruwalla, fue un eminente profesor que impartió clases en el Government College de Lahore.

Estos poemas reflejan el compromiso de buzos para ser la voz denunciante de las injusticias, los anhelos y la resistencia de un pueblo que busca ser escuchado.

El mundo está saturado de imágenes y la realidad misma ha perdido significado. Cada individuo se enfoca en su imagen y en agradar a los demás; esto ha permitido que se deje de pensar en lo que ocurre alrededor, que se deje de valorar también lo que está delante.

La fábula en verso El gato y el ratón, del periodista, escritor y poeta mexicano José Joaquín Fernández de Lizardi.

La condena al imperialismo, la denuncia de sus atrocidades y calumnias contra la URSS, así como la certeza del fin del capitalismo son la esencia del poema "Yo canto a Lenin".