La inmigración en Estados Unidos se está encaminando a cero o incluso a un valor negativo debido a las políticas migratorias del presidente Donald Trump, lo que podría afectar la productividad y reducir la fuerza laboral del país, señaló el medio británico The Economist.
"La represión migratoria afecta tanto a los trabajadores poco cualificados como a los altamente cualificados, lo que perturba las industrias que dependen de la mano de obra migrante y podría generar mayores costes y una menor producción", indicó la publicación.
En este sentido, dijo que las consecuencias a largo plazo incluyen menor salud fiscal y menores niveles productivos, pues los migrantes contribuyen en gran medida a la innovación y a la expansión económica.
Por ello, consideró que las políticas de la administración podrían disuadir a los migrantes cualificados, agravando los desafíos económicos en medio de un contexto de envejecimiento de la población.
Argumentó esta opinión editorial haciendo referencia a que el indicador de migración ilegal en la frontera con México se ha desplomado, en gran medida, porque el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE, por sus siglas en inglés), ha intensificado las redadas de deportación.
También sentenció que el gobierno de Trump tiene planes de cobrar 100 mil dólares por una visa H1-B, el principal permiso de entrada para migrantes con talento que sumaría a la productividad.
Ante este panorama, advirtió que la política de “cero migración” empobrecerá a los residentes estadounidenses, tanto nativos como extranjeros, toda vez que se reducirá el crecimiento de la productividad, y por lo tanto, el Producto Interno Bruto (PIB) por habitante.
Escrito por Sebastián Campos Rivera
Periodista de finanzas, economía, negocios, mercados, divisas, indicadores y el sector energético. | X: @srivera1410