Elevar la participación femenina en México al nivel de la OCDE podría aumentar el PIB en 6.9 billones de pesos para 2035.
Cargando, por favor espere...
En los últimos meses, los gobiernos de algunas naciones europeas han expresado que realizarán “reformas” en el gasto del gobierno que van encaminadas a desmantelar lo que queda del Estado de Bienestar. Como ejemplos, el canciller alemán Christian Merz dijo públicamente: “El Estado de Bienestar, tal como lo tenemos hoy, ya no se puede financiar con lo que producimos en la economía”; se pretende reformar el sistema de pensiones e incluso se barajó aumentar la edad de jubilación a 70 años. En Reino Unido dijeron que en los próximos cinco años recortarán la asistencia social para “ahorrar” tres mil 400 millones de libras esterlinas. En esta situación están Francia, Finlandia y Suecia, por mencionar algunos.
Lo que se ha pretextado para justificar las medidas es que el envejecimiento de la población hace “costoso” mantenerla, que los niveles de deuda pública son alarmantes y que el crecimiento económico es insuficiente para financiar la salud, educación, seguros de desempleo, etc. Sin embargo, esta narrativa omite que existen alternativas, como hacer que paguen más impuestos quienes más riqueza acumulada tienen.
El Estado no genera riqueza por sí mismo; su capacidad de gasto depende de los ingresos que recaude. La pregunta central no es, por tanto, si hay dinero, sino de dónde se puede obtener. La riqueza nacional es creada por los trabajadores y se divide en dos partes: el salario (que asegura la subsistencia del trabajador) y el plusvalor (la porción de la que se apropian los capitalistas). Sería un absurdo aumentar los impuestos a los trabajadores, cuya capacidad de ahorro es casi nula. La solución más lógica es recaudar más de quienes se benefician de la riqueza generada colectivamente: los grandes capitales y las fortunas acumuladas mediante la apropiación del trabajo no pagado. Que esta opción sea sistemáticamente descartada evidencia la verdadera naturaleza de las “reformas”.
El impulso por recortar el gasto social responde a la caída tendencial de la tasa de ganancia. Se está buscando restaurar los niveles de rentabilidad de los capitales, pues la competencia global, la saturación de los mercados y la inestabilidad geopolítica los han puesto en jaque. ¿Cómo lo hacen? Atacando el “salario indirecto” que representa el Estado de Bienestar. El recorte de servicios sociales permitirá privatizar y mercantilizar los servicios públicos restantes, abriendo así nuevos campos de inversión (salud privada, pensiones privadas, educación privada, etc.); y reducir costos, pues disminuirá la parte de la riqueza que corresponde a la fuerza de trabajo, liberando más plusvalor para ser apropiado por el capital.
Esto es más evidente si tomamos en cuenta que los gobiernos europeos aumentarán su gasto militar. Alemania, por ejemplo, tiene el propósito de que su gasto militar alcance el 3.5 por ciento del PIB en 2029 (en 2024 fue de dos por ciento); el Reino Unido, 4.1 por ciento del PIB en 2027. Se prioriza el gasto militar porque garantiza el orden geopolítico para la acumulación de sus capitales y porque inyecta capital directamente en el sector industrial. El gasto social, en cambio, es visto como un mero “costo” que reduce la plusvalía disponible.
Se deben defender las conquistas de los trabajadores materializadas en el Estado de Bienestar y denunciar que el Estado no está imposibilitado para obtener ingresos para estas funciones, pues puede aplicar impuestos a las grandes fortunas. Pero también se debe tomar conciencia de que la única solución permanente a las crisis recurrentes es superar el capitalismo y organizar la producción social sobre una base radicalmente diferente, que descanse en la satisfacción de las necesidades humanas y no en la valorización del capital.
Elevar la participación femenina en México al nivel de la OCDE podría aumentar el PIB en 6.9 billones de pesos para 2035.
El apoyo a la petrolera alcanzó 380.6 mil mdp hasta septiembre, un monto que superó al gasto ejercido por la Secretaría de Educación en el mismo periodo.
México se consolida como el segundo mayor importador mundial de granos, y mantiene el primer lugar como comprador global de maíz.
Alzas en electricidad y transporte aéreo impulsaron el incremento quincenal.
La extrema derecha, o neofascismo, avanza en el mundo peligrosamente, en particular en las naciones del bloque imperialista occidental.
Aunque las actividades primarias mostraron dinamismo, la industria y los servicios limitaron el desempeño del país.
El estancamiento persiste pese a un leve avance en actividades secundarias
La tasa por mora subirá a 2 por ciento y el ISR retenido a actividades digitales será de hasta 4 por ciento.
El gasto alcanzó más de 960 mil millones de pesos entre enero y septiembre de 2025.
La disminución de la demanda por bonos gubernamentales comenzó en abril y se ha intensificado ante un panorama económico adverso
De acuerdo con diversos medios de comunicación, en lo que va del sexenio de la presidenta Claudia Sheinbaum se han perpetrado más de 10 asesinatos de alcaldes en varios estados de la República Mexicana.
Aunque el FMI avaló el desempeño macroeconómico, también resaltó la debilidad económica del país.
El financiamiento al sector salud sigue lejos de lo recomendado por la OMS.
La medida fue publicada en el DOF.
Quintana Roo, Sinaloa, Nuevo León e Hidalgo registraron las mayores contracciones
Alejandro Gertz Manero renuncia a la Fiscalía General de la República
Fraude y extorsión: alertan por falsos trabajadores de CFE
Informalidad laboral alcanza 33 millones de mexicanos en el tercer trimestre de 2025
Trabajadores del Metro preparan marcha y paro de labores
Pemex entrega contratos por casi 2 mil mdp a dueño de Miss Universo México
“Generación Z” realidad y manipulación
Escrito por Ollin Vázquez
Maestra en Economía por la UNAM.