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¿Para qué pensar en cuáles son las causas históricas de la sociedad actual? ¿Por qué habríamos de cuestionarnos sobre el futuro de la humanidad o hacer algo para contribuir con las futuras generaciones? Desde el posmodernismo, estas preguntas parecen innecesarias.
Se le llama posmodernismo a una forma de pensamiento que pone en duda la objetividad, se trata también de una comprensión ahistórica de la realidad, es decir, que no se detiene a reflexionar cómo se ha construido, históricamente, la sociedad. El posmodernismo ha tenido relevancia en la sociedad moderna y se ha asumido, de acuerdo con el filósofo Carlos Fernández Liria, porque es preferible la comodidad que cuestionar la insoportable vida bajo el capitalismo. Es más cómodo asumir que no existen verdades objetivas, que todo ha de pasar por juicios subjetivos que complazcan a individuos particulares, sin tener que comprobar tales juicios individuales; es preferible, en general, asumir inercialmente la lógica del statu quo gobernante. El posmodernismo es una inercia que nos sumerge en la indiferencia ante la política y la razón de ser de la política.
¿Para qué cuestionar si de todas maneras no pasa nada diferente, si el mundo sigue igual y las acciones individuales no repercuten en el estado de cosas? Se prefiere entonces vivir un mundo propio, en donde cada individuo vela por sí mismo o su familia; se construyen vidas atomizadas y basadas en imágenes propias: de lo que se trata es de gustarte a ti mismo y a los demás, de estar satisfecho contigo mismo y, sobre todo, de superar a tu yo del pasado. Dicho sea de paso, la superación de tu “yo del pasado” o el hecho de “gustarse a uno mismo” no significa algo catastrófico o incorrecto, pues puede contribuir a la superación de crisis emocionales o simplemente a colaborar mejor en el ámbito social laboral. No obstante, si se pone demasiado énfasis en tales tipos de autocuidado, se pierde de vista la responsabilidad con la comunidad.
El mundo está saturado de imágenes y la realidad misma ha perdido significado. Cada individuo se enfoca en su imagen y en agradar a los demás; esto ha permitido que se deje de pensar en lo que ocurre alrededor, que se deje de valorar también lo que está delante. En la construcción de imágenes individuales, relativizadas en extremo, tienen gran importancia los medios de comunicación y las redes sociales. Y las imágenes en tales plataformas ya tampoco representan, en general, la realidad. Porque las imágenes proyectadas son frecuentemente construcciones que favorecen a determinadas élites. La información, las imágenes en los medios generalmente –puede haber excepciones– no reflejan la realidad, ésta ha sido manipulada para llegar convenientemente al público.
No obstante, hay quienes aún se atreven a ser materialistas e históricos: a confirmar que, en efecto, existe una realidad objetiva a la que conviene cuestionar, pues es el fundamento de las injusticias. De este modo, se descubre que vivimos en una condición capitalista, que no sólo puede ser comprendida por individuos, sino que puede ser comprobable objetivamente más allá de subjetividades: puede pasar por un escrutinio social e histórico y comprobarse que se vive bajo un sistema político y económico que requiere ser extirpado de la historia. Quienes se atreven a seguir pensando en tal objetividad materialista se denominan marxistas, a quienes no es apropiado menospreciar porque son quienes sobre todo luchan por construir una sociedad más justa.
Antolorgía de poetisas del 27, de Emilio Miró, es un importante esfuerzo para revalorar la obra de cinco poetisas españolas de la “Generación del 27”, entre ellas, Concha Méndez y Rosa Chacel.
La cinta que hoy comento, amable lector, es también una obra de arte con ese mismo sentido de denuncia hacia la ideología nazi-fascista y sus aplicaciones en el terreno práctico.
Los matemáticos no sólo eran conocedores de la génesis de su disciplina, sino que ejercían una alta valoración de la Historia de la Matemática.
La historia, que no se olvide nunca, la hacen los pueblos y hoy, los pueblos, tienen la palabra.
Quienes se desenvuelven en el ámbito teórico son marginales en la transformación social si no tienen una fuerza popular con la cual fundirse.
El tránsito hacia una matemática filosófica exige iniciar una quinta revolución matemática; para ello, el estudio de la historia desde el hacer de un matemático es fundamental.
En este artículo se explica por qué sostener que el arte es un reflejo de la sociedad, así a secas, distorsiona y mutila el papel de la actividad artística y de los artistas.
Los relatos del autor denuncian los actos abusivos de los principales protagonistas y la burocracia oficial de la oligarquía que encabezó el dictador Porfirio Díaz Mori entre 1877 y 1910.
Hay registro de que del norte del país se hacían envíos periódicos de hatos a Puebla, CDMX y la zona de los volcanes. Sin embargo, la ganadería no prosperó debido a que la actividad principal en el centro del país era agrícola.
Hay que decir que la tesis de un arte contemporáneo descompuesto es sumamente escasa en las voces de los especialistas.
El Centro Nacional de Investigaciones Científicas (CNRS) francés sostuvo que en plena selva amazónica descubrió una “extensa red de ciudades de dos mil 500 años de antigüedad”.
Desde su exilio en México, León Felipe prologaba así el poemario "Belleza cruel", de Ángela Figuera, reconociendo la valentía, el coraje y la esperanza de los poetas españoles de la posguerra.
“Nikolái Lenin, el líder ruso, es la figura revolucionaria que brilla más en el caos de las condiciones existentes en todo el mundo, porque se halla al frente de un movimiento que tiene que provocar ... la gran revolución mundial que ya está llamando a las puertas de todos los pueblos".
Son historias de viajeros que por motivos de conquista económica, política, religiosa, curiosidad científica o espíritu de aventura visitaron otras regiones del mundo donde hallaron paisajes, edificaciones y grupos humanos diferentes a ellos.
Se trata de una abstracción analítica en la que debemos separar tres elementos, y en la que la palabra arte y sus derivaciones se embrollan unas contra otras.
Escrito por Betzy Bravo
Investigadora del Centro Mexicano de Estudios Económicos y Sociales. Ganadora del Segundo Certamen Internacional de Ensayo Filosófico. Investiga la ontología marxista, la política educativa actual y el marxismo en el México contemporáneo.