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Mao Tse-tung nació en Hunan el 26 de diciembre de 1893 y murió en Pekín el nueve de Septiembre de 1976. Fue el máximo dirigente del Partido Comunista Chino y fundador de la República Popular China en 1949, tras su victoria en la Guerra Civil contra las fuerzas de Chiang Kai Shek, quien se exilió a la isla de Taiwan, creando la China Nacionalista.
Nacido en el seno de una familia de trabajadores rurales, su infancia transcurrió en un medio en el que la educación escolar sólo era considerada útil en la medida en que pudiera ser aplicada a tareas como llevar registros y otras labores propias de la producción agrícola, por lo que, a la edad de trece años, abandonó los estudios para dedicarse de lleno al trabajo en la granja familiar.
Más tarde dejó la casa paterna y entró en la Escuela de Magisterio en Changsha, donde comenzó a tomar contacto con el pensamiento occidental. Posteriormente se enroló en el Ejército Nacionalista, en el que sirvió durante medio año, tras lo cual regresó a Changsha y fue nombrado director de una escuela primaria. Trabajó en la Universidad de Pekín como bibliotecario ayudante y leyó, entre otros, a Bakunin y a Kropotkin, además de tomar contacto con dos hombres clave de la que habría de ser la revolución socialista china: Li Dazhao y Chen Duxiu.
En 1921 participó en la creación del Partido Comunista, y dos años más tarde, al formar el partido una alianza con el Partido Nacionalista, quedó como responsable de organización. Sin embargo, la alianza con los nacionalistas se quebró, los comunistas y sus instituciones fueron diezmados y la rebelión campesina, reprimida; junto a un numeroso contingente de campesinos, Mao huyó a la región montañosa de Jiangxi, desde donde dirigió una guerra de guerrillas contra sus antiguos aliados. El Ejército Rojo, nombre dado a las milicias del Partido Comunista, logró ocupar alternativamente distintas regiones rurales del país; al año siguiente se autoproclamó la nueva República Soviética de China, de la que fue elegido presidente. Pese a la victoria en la primera época de la guerra civil, en 1934 Chiang Kai-Shek consiguió cercar a las tropas del Ejército Rojo, tras lo cual Mao emprendió la que se conoció como la Larga Marcha, desde Jiangxi hasta el noroeste chino. Entre tanto, los japoneses habían invadido el norte del país, lo que motivó una nueva alianza entre comunistas y nacionalistas para enfrentarse al enemigo común.
Tras la Segunda Guerra Mundial, se reanudó la guerra civil, con la victoria progresiva de los comunistas. El 1º de octubre de 1949 se proclamó oficialmente la República Popular China, con Mao Tse-tung como presidente. Si bien al principio siguió el modelo soviético para la instauración de una república socialista, con el tiempo fue introduciendo importantes cambios.
En 1959 dejó su cargo como presidente chino, aunque conservó la presidencia del partido; desde este cargo promovió una campaña de educación socialista en la que destacó la participación popular masiva como única forma de lograr un verdadero socialismo, su filosofía política como estadista quedó reflejada en su libro Los pensamientos del presidente Mao.
Junto a su actividad política, militar y revolucionaria, tuvo tiempo para cultivar otros aspectos culturales. Escribió textos históricos, filosóficos, económicos, así como también, aunque en menor medida, literarios. Su breve creación poética comprende 37 poemas cuya primera traducción a la lengua española fue realizada en China en 1963 por el Servicio de Ediciones en Lenguas Extranjeras. Posteriormente se han venido editando los poemas de Mao en diversas editoriales españolas e Hispanoamericanas. Para algunos críticos, los esfuerzos literarios de Mao eran meros escarceos juveniles sin relevancia. Otros han proferido grandes alabanzas a su poesía. Dejemos que el lector opine por sí mismo extrayendo sus propias conclusiones.
Alto es el cielo
Alto es el cielo, las nubes lo surcan.
Vense patos salvajes que buscan
[el sur más allá del horizonte.
Cuento con mis dedos: cuatro mil
[leguas de distancia;
y me digo que no seremos héroes si no
[llegamos a la Gran Muralla.
Ahora, de pie, en el pico más alto
[de las Seis Montañas,
la bandera ondeando en el viento
[del oeste,
con esta larga cuerda en sus manos,
me pregunto cuándo lograremos
[amarrar al monstruo.
A propósito de un poema del camarada Kuo Mo-Jo
En este minúsculo globo
unas cuantas moscas se golpean
[contra el muro;
zumban sin pausa,
a veces con voz chillona,
a veces, gemidora.
Se jactan de gran nación las hormigas
[que trepan por la acacia;
pretenden sacudir un árbol los insectos,
¡qué valiente empeño!
Ahora, cuando al viento del oeste cae
[sobre Changan, las hojas,
silban las flechas sonoras.
Tantas tareas por delante,
todas tan urgentes.
El mundo gira, el tiempo apremia.
Diez mil años es demasiado,
hay que aprehender el día,
[aprehender el instante.
Los Cuatro Mares hierven, se enfurecen
[las nubes y las aguas,
los Cinco Continentes se estremecen,
[rugen truenos y huracanes.
Hay que exterminar todas las plagas
ninguna fuerza es capaz de resistir.
De T’Ingchou a Chángsha
(según la melodía Tieh lien Hua)
En junio, los valientes soldados atacan a los corrompidos y viciosos,
intentando prender el basilisco y la ballena con una enorme cuerda.
Al otro lado del Kan ya se ven rojas franjas de tierra
gracias a la división mandada por Huang Kung-lüeh.
Millones de soldados y campesinos
[saltaron de alegría,
pisaron Kiangsi como una estera y
avanzaron sobre Hunan y Hupeh.
Los conmovedores acordes
[de La Internacional
descendieron sobre nosotros como
[tempestad furiosa.
Despedida al Dios
de la Plaga
La lluvia roja estalla a gusto en olas;
para nuestros puentes, los montes
sirven de columnas;
los picachos de plata retumban en la cima del cielo;
las riberas se entregan temblando a los brazos de hierro.
–¿A dónde quieres huir, oh dios pestilencial?
Los cirios y los barcos de papel encienden el cielo.
Chung Yang
(según la melodía Ts´ai Sang Tzu)
El hombre, no el cielo, envejece pronto:
siempre, todos los años, “Chung Yang”.
Hoy, otra vez, “Chung Yang”,
y las flores amarillas del campo
[de batalla
esparcen su inefable fragancia.
Una vez al año, en el otoño, el viento
[sopla fuerte,
no como lo hace, suavemente,
[en primavera.
Sin embargo, ¿dónde encontraremos
[en primavera
tal inmensidad de ríos y de cielos
[helados.
Dapodi
(Según la melodía Pu Sa Man)
Rojo, naranja, azul, añil, violeta,
[verde y amarillo:
¿quién en el cielo danza ondulando
[esta cinta de colores?
El Sol poniente ha vuelto, tras la lluvia,
y se tornan azules a trechos las colinas.
Hubo aquí en el pasado
un furioso combate. Los impactos de
las balas señalan los muros de la aldea.
¡Muros condecorados!
Las colinas parecen hoy más bellas.
Día de Año Nuevo
Ninghua, Chingliu, Kueihua–
¡Qué senderos estrechos, bosques profundos y musgo resbaladizo!
¿A dónde nos dirigimos hoy?
Derechos al pie del Monte Wuyi.
A la montaña, al pie de la montaña,
banderas rojas ondean al viento cubiertas de gloria.
El desfiladero de Lushan[1]
(Según la melodía Yi Chin O)
Sopla furioso el viento del oeste;
lejos la oca salvaje grazna bajo
la luna de un amanecer de escarcha.
Bajo la luna de un amanecer
[de escarcha
se triza el ruido de los cascos
[del caballo,
la trompeta enmudece.
No digáis que es inexpugnable
el desfiladero imponente.
Hoy mismo vamos a dar el paso para
[cruzar la cumbre.
¡Cruzaremos la cumbre!
Estas montañas son como el mar,
[azules,
y parece de sangre el Sol poniente.
El doble nueve[2]
(Según la melodía Tsai Sang Tsé)
Es fácil que envejezca el hombre,
[mas no la naturaleza.
Todos los años se celebra
[el Doble Nueve.
Pero este año, para el Doble Nueve,
las flores de oro tienen un aroma
[insólito
en el campo de batalla.
Cada año sopla violento
el viento del otoño:
no es como el de primavera,
es mejor que el de primavera;
bajo el cielo, las inmensas extensiones
de escarcha.
En el Ejército Rojo nadie temía
las miserias
En el Ejército Rojo nadie temía
las miserias de la Larga Marcha.
Mirábamos con desdén los miles
de picos, los millares de ríos.
Las Cinco Montañas subían y bajaban
[como oleadas ondulantes;
Los montes de Wuliang semejaban
[pequeñas piedras verdes.
Cálidos eran los precipicios abruptos
cuando el Dorado Río de Arena
[discurría por las alturas.
Fríos eran los puentes de cadenas
[que pendían sobre
el Río Tati.
Por las inmensas extensiones nevadas
[de la Montaña Min, felices,
vencido el último desfiladero,
[los Tres Ejércitos sonreían.
La Gran Marcha
El Ejército Rojo no teme las duras
[pruebas de la Gran Marcha
y diez mil montañas y ríos son como
[un corto paseo.
Las cinco cordilleras son
[como suaves olas
y las redondas cimas de Wumeng son
[apenas bolas de barro.
Las aguas del Chinsha entre la niebla
[y los acantilados,
y el frío puente de hierro sobre el río Tatu.
Qué gozo dan estos mil li de nieve
[sobre Minshan:
es entonces cuando en el rostro
[de los hombres
de los tres ejércitos aparece la sonrisa.
[1]. El poema describe el combate que permitió que el Ejército Rojo tomara Tsunyi, sitio donde se encuentra el desfiladero de Lushan. En este lugar se celebró la Reunión de Tsunyi, conferencia que definió la posición que ocuparía Mao en el Partido y en el ejército. El poema pertenece al género Shi; en concreto, al modelo Yi Chin O. Yi significa recuerdo. Chin O es el nombre de la dama de honor de una emperatriz de la dinastía Tang.
[2]. El Doble nueve es una fiesta del calendario chino. Las “flores de oro” son los crisantemos que los antiguos admiraban durante esa fiesta. Este poema fue escrito el año en el que el IV Ejército Rojo obtuvo varias victorias.
Nació en Teherán, Irán, en 1980, donde vive y trabaja actualmente como redactor jefe de poesía en Cheshmeh Publishing House.
Conocido como “el poeta de la revolución”, es el más conocido de los líricos vietnamitas del Siglo XX. Se convirtió en una celebridad de la cultura vietnamita y un poeta del humanismo revolucionario.
En el Siglo XVIII, el poeta español Tomás de Iriarte (1750-1791) no se limitó a seguir la tradición clásica, circunscrita a reescribir a Esopo y Fedro.
Amparo Poch fundó, en 1936 –junto a Lucía Sánchez Saornil y Mercedes Comaposada–, la revista Mujeres libres.
México ha consagrado ya ante la posteridad, de un modo duradero, la gloria del eminente pensador, del gran apóstol de la Reforma.
Este 2023 se conmemora el centenario del asesinato de Francisco Villa... y el tiempo desde su sacrificio no ha impedido que su presencia siga vigente. Hoy concita odios y agresiones en su contra y contra su memoria.
Una obra “cabal y desbordante, de inefable amor al terruño… este libro abarca no sólo las facetas histórica, legendaria y romántica de Yucatán, sino también el original ambiente propio de esta tierra, cálida y cordial, lo que le es inmutable”.
El hallazgo sucedió en mayo de 2022 por el paleontólogo Damien Boschetto, quien observó en el borde de un acantilado derrumbado un hueso expuesto.
Fue la tercera hija de un opulento comerciante de la ciudad de Sakai, cerca de Osaka.
Destacada escritora y poetisa india nacida el 31 de marzo en Kerala.
Y de pronto apareció por ahí ese maldito Iceberg llamado Poesía o Literatura o Aburrimiento o lo que fuera, con la única condición precisa de no devenir en Aburrimiento ni por un instante.
Conocido por su habilidad para entrelazar temas sociopolíticos con historias personales y culturales.
En este poema, Korsi denuncia la forma en que la construcción del Canal trajo consigo la degradación de hombres y mujeres, convertidos en prostitutas, ebrios y personajes del bajo mundo para solaz y diversión de los turistas extranjeros.
Durante el gobierno de Napoleón, Francia vivió una época brillante para la ciencia, se hablaba del Imperio de las Ciencias.
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Escrito por Redacción