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Seguramente recordarán como Andrés Manuel López Obrador, antes de llegar a la presidencia, criticaba todos los días la situación del país, decía tener la solución a los problemas que nos aquejaban y no dejaba pasar desgracia alguna para reprochar al presidente en turno su mala gestión, exhortándolos por ello a renunciar. Hoy que ya es presidente, esas soluciones para construir un México mejor que pregonaba, se muestran como promesas sin fundamento o mentiras evidentes que sólo sirvieron para obtener el voto de los mexicanos para llegar al poder. Debido a que el presidente nunca tuvo un proyecto ni ideas claras de cómo gobernar, hoy el país es un desastre y estamos peor que antes: hay más pobreza, más desempleo, inflación, aumento de la delincuencia, feminicidios todos los días, miles de desplazados por la violencia, no hay servicios de salud, ni medicinas, ni vacunas para los niños, etc.; y el gobierno no hace nada para remediarlo.
Para tapar su incompetencia, el presidente y su partido han echado mano de todo el poder del estado para imponer sus decisiones, distraer la atención de los asuntos relevantes, perseguir opositores y a quienes critican su mal gobierno. Uno de estos mecanismos es la facultad establecida en los artículos 89 y 92 de la Constitución, que le permiten al presidente de la República, para el buen despacho de los asuntos, expedir decretos o acuerdos para ordenar o establecer acciones o medidas necesarias, relacionadas con algún tema de importancia nacional. Tales disposiciones normativas no pueden ser contrarias a la Constitución, pues son reglas de menor jerarquía, y tampoco pueden modificar o alterar el contenido de una ley, por lo que no se puede por ello, usurpar las funciones del Congreso de la Unión.
Como dijimos, el presidente ha usado estos acuerdos o decretos para imponer sus decisiones, extralimitándose muchas veces en los alcances que estos instrumentos de gobierno pueden tener. Ejemplo de ello, es el Acuerdo del Ejecutivo emitido el 11 de mayo de 2020, donde el presidente dispuso que las fuerzas armadas realicen acciones de seguridad pública hasta marzo de 2024 (el cual fue impugnado ante la Suprema Corte) con el que, contrario a lo prometido en campaña, López Obrador respaldo que 80 mil militares estén en las calles realizando labores de policía, la cifra más alta desde que el entonces presidente Felipe Calderón comisionó a las fuerzas armadas para ello; medida que no ha servido para mucho, pues la violencia y la delincuencia en México crecen día con día.
Otro ejemplo es el Acuerdo emitido el 22 de noviembre de 2021 por el que el presidente determinó que las obras y proyectos del Gobierno de México serían considerados de interés público y seguridad nacional, con el cual ordenó a las secretarías simplificar trámites administrativos y permisos (como la Manifestación de Impacto Ambiental) para su realización, evitar entregar información relacionada con tales obras y dificultar que los amparos promovidos por la sociedad civil, sirvieran para suspender su construcción, como ocurrió con el Aeropuerto de Santa Lucia y, en estos días, con el Tren Maya, donde el gobierno está devastando la selva.
Ahora, por el fracaso que está resultando el Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles, donde sólo hay seis vuelos diarios, el Subsecretario de Transportes dijo en una entrevista hace unos días, que se expedirá un decreto para limitar las operaciones del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México en un 20% pues está saturado. Aunque afirmó que tal decreto no es para obligar a las aerolíneas a volar desde el Felipe Ángeles, es evidente que tal decreto buscará precisamente eso ya que, a pesar de las presiones gubernamentales, las aerolíneas no ven rentable volar desde tal terminal aérea. Al presidente le urge tal cosa, de lo contrario, el aeropuerto que con tanto orgullo inauguró prematuramente en marzo pasado, se podría convertir en evidencia del fracaso de su gobierno.
La facultad del presidente de emitir decretos o acuerdos no es nueva en el sistema mexicano y es necesaria para hacer más eficientes los procesos al gobernar. Pero, en este sexenio, ante el fracaso de su gestión, el presidente pretende lograr a punta de decretos lo que no ha podido hacer por falta de interés, conocimiento y, sobre todo, por carecer de un proyecto serio y científico de país, donde se privilegie el bienestar de los mexicanos, por encima del interés por el poder.
Los miembros de la Guardia Nacional son solo un adorno, porque la ola de violencia delictiva en Hidalgo, en vez de reducirse, ha aumentado exponencialmente en el bienio 2020-2021, como lo demuestran las estadísticas del SESNSP.
La expulsión de representantes y el cierre de la OEA por Nicaragua concreta el deseo de AL de erradicar la hegemonía regional de EE. UU., cuyo gobierno la ha utilizado como arma al servicio del neocolonialismo estadounidense.
A 3 años de la desaparición del Fonden, la 4T se muestra, otra vez, incapaz para prevenir ese tipo de “desgracias que no esperan”, pero que siempre se presentan.
Las expresiones de rebeldía de la comunidad LGBT en este día tendrían mayor y mejor efecto si cada uno de nosotros lucháramos cada día, sin importar nuestras preferencias, por la construcción de una patria más justa para todos.
“Es una soberana tontería descalificar la prueba Pisa con el argumento de que es neoliberal. El nivel educativo de un país es resultado de políticas públicas que ofrezcan igualdad de oportunidades, algo en lo que ha fracasado escandalosamente este gobierno”, señaló Jesús Zambrano.
Mientras en Palacio Nacional, el gobernante de México afirma dormir con la conciencia tranquila y tiene dulces sueños, para sus millones de gobernados, su gobierno ha resultado ser una pesadilla terrible.
Hoy el mundo abre una posibilidad sin precedentes. La realidad está reclamando un cambio. Éste, sin embargo, más allá de análisis teóricos y académicos relegados por la historia, tiene sólo dos vías: socialismo o barbarie.
Desempleo y pobreza seguirán aumentando necesariamente con el desarrollo tecnológico, mientras exista el capital, y particularmente el neoliberalismo, y la máxima ganancia constituya el motivo económico determinante
El Presidente es sólo una pieza en el engranaje del control político.
Anuncian para mañana cadenas humanas en los principales municipios para solicitar al gobierno encabezado por Mauricio Villa, cumpla los compromisos de hace tres años con la gente pobre.
La pobreza y sus secuelas persisten, y se ahondan, en necesaria correlación con la acumulación de riqueza que cobró inusitada fuerza en este sexenio.
No fue sólo el huracán “Otis” el que destruyó Acapulco. En todo caso, con su implacable poder natural y su arrolladora fuerza, lo que dejó al descubierto fue el fracaso de la política nacional y la continuidad discursivamente negada de la práctica del neoliberalismo en nuestro país.
El partido Movimiento Regeneración Nacional (Morena) no es una organización de izquierda.
El estado está entre las cinco entidades con mayor abandono escolar; las principales causas del rezago son la falta de recursos económicos de las familias, la desnutrición infantil y los embarazos prematuros.
La cultura del “pueblo bueno” son las verbenas y los chamanes; la cultura de la “minoría rapaz” son las sinfonías y los teatros elegantes.
Oaxaca de Juárez, dos años sin relleno sanitario
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De nuevo, EE. UU. veta resolución de la ONU sobre alto al fuego en Gaza
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Escrito por Maribel Rodríguez
Abogada, especialista en Derecho Constitucional.