Cargando, por favor espere...
La realidad, el mundo en que vivimos, es una suma de cosas diversas. Para poder conocerlo, hay que explorar las distintas partes que lo componen. Esto no se limita a lo sensorial, a lo que podemos conocer por medio de los sentidos, aunque éstos sean la base de lo que conocemos. El hecho es que, a lo largo de toda la experiencia humana, nos hemos determinado como seres que experimentamos nuestro entorno y reflexionamos con él y a partir de él. Dicha reflexión no es pasiva; es decir, no nos limitamos a reflejar en nuestra conciencia lo que percibimos con nuestros sentidos. Para poder conocer científicamente las cosas, es fundamental dar un paso más allá y comprender aspectos que no podemos apreciar a simple vista.
La historia de la filosofía ha sido prolífica en este debate. En su desarrollo, ha mostrado que los unilateralismos, es decir, poner excesivo énfasis en una de las partes del problema, regularmente obvian otras partes que también conforman lo real. En el problema del conocimiento científico, por ejemplo, si solamente tomamos en cuenta la experiencia sensorial, dejamos de lado el análisis de las fuerzas internas que hacen que las cosas se manifiesten tal y como son.
Hay que agregar a lo anterior que el ser humano tiene una historia complejísima, pues son muchas las cosas que lo han ido determinando y que ha creado en su paso por el mundo. Ha creado formas de producir los bienes necesarios para poder sobrevivir, pero, aunado a esto, ha desarrollado ideas políticas para sustentar el aparato estatal bajo el cual realiza su vida social. Ha creado múltiples formas de expresión artística, que son muestra de lo que es capaz de alcanzar la humanidad cuando se despliegan sus capacidades creativas. Ha sido capaz de crear sistemas de pensamiento que intentan dar cuenta de la experiencia de la conciencia en la historia humana, etcétera.
Para poder conocer lo que el ser humano es, no podemos conformarnos con conocer sólo una de sus partes, pues lo que lo conforma y lo explica es ya un conglomerado de experiencias que no se pueden olvidar, a riesgo de obtener una explicación muy parcial de lo que somos y de hacia dónde vamos.
Si es verdad que, para poder transformar el mundo, hay que conocerlo, esto significa conocerlo en toda su complejidad, de la manera más detallada posible, estudiando todas las determinaciones que hacen que una cosa sea lo que es. Por eso, aquellos que luchan por cambiarlo todo no pueden sino convertirse en verdaderos teóricos proletarios. También es cierto que la realidad de nuestros días está atravesada por intereses económicos que tergiversan la realidad con el fin de impedir que se difunda lo que realmente ocurre en determinados países, manipulando la información en beneficio de los poseedores del gran capital. Pero, para contrarrestar esto, es necesario acelerar la educación de la gente, elevar su capacidad para comprender y desentrañar la esencia de los fenómenos, y desarrollar su conciencia crítica, de modo que todo lo que llegue a sus manos deba pasar necesariamente por el criterio racional de cada quien. Ampliar el conocimiento de lo que somos, estudiar las distintas formas del pensamiento que nos determinan, experimentar y aprender a sentir las diversas formas de expresión artística con las que se manifiesta la humanidad deben ser, y han sido, la clave para llevar al éxito los distintos proyectos de transformación social.
El tren de los niños (2024), de la realizadora italiana Cristina Comencini, se ambientada en los primeros años, después de haber concluido la Segunda Guerra Mundial.
Fue uno de los mayores exponentes de la Harlem Renaissance de los años veinte.
La tenacidad en su trabajo le acompañó hasta una edad muy avanzada.
La migración es un fenómeno propio del desarrollo de las sociedades.
La última tentación de Cristo (1988), obra cinematográfica en la que incluso llega a cuestionar la supuesta lealtad de los seguidores del Mesías.
El cuatro de septiembre de 1947 fallecía en su exilio permanente en la Ciudad de México, el escritor, periodista y poeta Alfonso Guillén Zelaya.
No sólo se trata de contemplar el elemento transformador, sino de transformar conscientemente: se requiere praxis.
La Grecia clásica confinaba a las mujeres a roles estrictamente definidos.
La crítica marxista es, además de un juicio que expone los problemas del capitalismo.
Existe ahora una expectativa palpable de que con Sheinbaum en el poder las posibilidades de impulsar una agenda feminista son más reales que nunca.
Vivimos en sociedad bajo un orden político específico.
Lafargue llega al objetivo central de su alegato en El derecho a la pereza: la reducción de los horarios de trabajo que en esa época prevalecían en Europa y el mundo.
México es un país con gran diversidad lingüística: 68 agrupaciones lingüísticas.
El evento es organizado por el Movimiento Antorchista con el fin de promover la actividad teatral en colonias, pueblos y escuelas populares.
Cuando nosotros llegamos al mundo nos encontramos con que ya había en él una serie de cosas que no fueron hechas por nosotros sino por otros.
Generación de imágenes por medio de IA gastó más de 216 millones litros de agua
Respaldan iniciativa sobre ciberseguridad
Anuncian banquete cultural en la XXI edición de Espartaqueada
En la mira de Washington 29 narcotraficantes mexicanos
Recorte de subsidios golpea al sector agrícola, educativo y social
Crear imágenes por medio de IA pone en riesgo la privacidad del usuario
Escrito por Alan Luna
Maestro en Filosofía por la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM).