Muchas de las mediciones que se emiten obedecen, en más de una ocasión, a un carácter subjetivo, es decir, dependen del planteamiento mostrado por el investigador para interpretar tal fenómeno de la realidad.
Cargando, por favor espere...
Ciudad de México.- Durante el segundo trimestre de 2018, 30.3 millones de trabajadores se desenvolvieron bajo la ‘sombra’ de la informalidad, cifra que representó un incremento de 3.3 por ciento anual, informó el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) mediante la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE).
El Instituto presidido por Julio Santaella, informó que el número de personas que se encuentran ocupadas en el país ascendió a los 53.8 millones de personas, de los cuales el 61.5 por ciento fueron hombres y el 38.4 por ciento fueron mujeres. Al menos el 56.6 por ciento de la fuerza laboral del país se desempeña en la informalidad.
Durante el periodo de abril a junio, la mayoría de las personas que no cuentan con prestaciones ni con condiciones formales de desarrollo laboral, se concentraron en actividades económicas que operan a partir de los recursos de los hogares, y que no están constituidas como empresas (como fondas, ventas de segunda mano, oficios, entre otras actividades), al arropar alrededor de 14.7 millones de personas.
Unos 7.5 millones de trabajadores informales se ganaron el sustento en empresas, gobierno e instituciones públicas, y aunque trabajan para unidades económicas formales, lo hacen bajo modalidades en las que se elude el registro ante la seguridad social. Esta forma de trabajo mostró un crecimiento de 5.1 por ciento durante el último año.
De acuerdo con el órgano estadístico, el resto de empleados que se desarrollan en la informalidad están ubicados en el ámbito agropecuario (5.9 millones de personas) y en el trabajo doméstico remunerado (2.2 millones de personas).
Por otra parte, la tasa de desocupación del segundo trimestre del año no mostró una variación importante en comparación a lo observado durante los primeros tres meses del año, al arrojar una tasa de 3.3 por ciento respecto a la población económicamente activa, cifra que se traduce en 1.9 millones de personas que no trabajaron y que se encuentran en disposición de buscar empleo.
Respecto a la tasa de subocupación, variable que se refiere al porcentaje de la población ocupada que tiene necesidad y disponibilidad de ofrecer más tiempo de trabajo de la su ocupación actual le demanda, esta mostró un incremento de 7.03 por ciento, su nivel más alto durante el último año.
Baja California Sur, entidad que se ha caracterizado por liderar la actividad industrial del país durante los últimos meses, es el estado de la República Mexicana con la mayor tasa de participación en la actividad económica (personas que tienen un trabajo y que ya se encuentran en edad de producir), con un 67.3 por ciento, seguido de Quintana Roo (66.9 por ciento), Colima (66.6 por ciento), Nayarit (65.3 por ciento) y Yucatán (64.4 por ciento).
Los mercados más grandes de ocupación laboral se ubican en el Estado de México y en la Ciudad de México, al registrar 7.6 y 4.3 millones de personas ocupadas, respectivamente.
Muchas de las mediciones que se emiten obedecen, en más de una ocasión, a un carácter subjetivo, es decir, dependen del planteamiento mostrado por el investigador para interpretar tal fenómeno de la realidad.
Recientemente, el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) dio a conocer los resultados de la medición de la pobreza para 2024 en nuestro país.
Prestigiados analistas e investigadores de universidades, institutos y asociaciones civiles opinan que los avances de la lucha contra la pobreza en México no son para celebrar.
El gobierno de la “Cuarta Transformación” (4T) festejó que, durante el sexenio pasado, 13.4 millones de mexicanos dejaron la pobreza.
La medición de la pobreza se ha convertido en uno de los criterios sustanciales para evaluar el desempeño gubernamental y las posibilidades de un crecimiento con desarrollo de un país.
El gobierno federal presume una ligera disminución en la pobreza estatal pasando del 60.4 por ciento en 2022 a 58.1 en 2024, pero esa “mejora” no altera las causas de fondo.
El Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval) era la institución encargada de medir la pobreza y el impacto de la política social en México, pero a mediados de este año sus funciones fueron transferidas al Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
Pero cabe preguntar: ¿cómo salieron de la pobreza 13 millones de mexicanos si la política económica del sexenio anterior fue por demás desastrosa?
La entidad financiera insistió en que la certidumbre jurídica y el empleo formal serán clave en la reducción de los niveles de pobreza
El especialista del Colmex negó que 13.4 millones de mexicanos hayan salido de la pobreza y asegura que los datos del Inegi están “cuchareados”.
El índice evalúa 173 ciudades en cinco categorías: estabilidad, atención médica, cultura y medio ambiente, educación e infraestructura.
Por más que algunos artífices del Gobierno de México se empeñen en acomodar su discurso por “cambiar” la situación de pobreza, marginación y miseria en que vivimos los mexicanos, los testimonios de las amas de casa, obreros, jefes de familia, campesinos o albañiles se imponen.
El rezago educativo y la falta de servicios básicos siguen afectando a millones
En zonas rurales, los hogares en Chipas registraron un ingreso promedio de 9 mil 862 pesos al mes para una familia de cuatro personas.
A pesar de su tamaño económico, México ocupa uno de los últimos lugares en generación de valor por hora trabajada, con efectos ya visibles en su Producto Interno Bruto (PIB).
Suspenden clases en FES Zaragoza por amenaza de “bomba”
Hijos de AMLO se amparan ante posibles órdenes de detención
Suman 20 muertos por explosión de pipa en Iztapalapa, CDMX
Renuncia otro juez en Tamaulipas; suman cinco bajas tras triunfo en elección judicial
Alistan simulacro nacional para el 19 de septiembre
Fallas y omisiones en la CNBV golpean a los ahorradores
Escrito por Redacción