Cargando, por favor espere...

La insoportable carga tributaria
Mientras no haya reglas claras, los ciudadanos de a pie tendremos que soportar una carga impositiva al gusto y capricho de los gobernantes, en tanto que ese dinero se destina a las clases sociales pudientes.
Cargando...

Es literal: los jefes de familia “se truenan los dedos” pensando en qué hacer para que les rinda su presupuesto. Sus ingresos dependen del trabajo del padre o la madre; también es recurrente que ambos aporten y aun los hijos que dejaron de estudiar, pero son tantos los gastos que ni así logran enfrentar el costo excesivo de la vida. Al iniciar el año, los ahorros, el aguinaldo y los préstamos se fueron con el periodo Guadalupe-Reyes y la actual cuesta de enero ha resultado muy pronunciada debido a que la inflación (en particular los precios de los alimentos) ya es de dos dígitos, es decir, superior al 10 por ciento. La Organización Internacional del Trabajo (OIT) declaró recientemente que los aumentos salariales han sido insuficientes frente a la pérdida del poder adquisitivo. El dinero no alcanza para nada; y los productos que la gente compraba más ahora tienen menor demanda, lo cual repercute en las empresas que no venden sus mercancías y con ello se forma un círculo vicioso que intensifica la crisis económica.

Pero si esto no fuera suficiente, en cada comienzo de año hay que pagar impuestos, todos ajustados al alza con tasas definidas por el monto de la inflación. Para poner un ejemplo, citemos los impuestos más comunes: el impuesto Sobre la Renta (ISR), al Valor Agregado (IVA), el Especial de Prestaciones y Servicios (IEPS), el predial, las tenencias y verificaciones vehiculares, cuya carga no reporta ninguna compensación para las clases populares en el Presupuesto de Egresos de la Federación (PEF), porque el dinero recabado se orienta a mejorar los servicios de las clases altas y a aquéllas solo “les caen algunas gotitas” de los programas asistencialistas. Datos del Centro de Investigación Económica y Presupuestaria (CIEP) revelan que los mexicanos destinan más del 15 por ciento de sus gastos al pago de impuestos; y la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económico (OCDE) revela que México es la nación con menos recaudación de impuestos entre los países que la integran; y que mientras en Dinamarca equivalen al 46 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB), aquí apenas aportan el 16.5 por ciento. El estudio evidencia asimismo que la carga tributaria recae fundamentalmente sobre las espaldas del pueblo trabajador y que las grandes empresas –en particular las que pertenecen a los dueños cercanos al Gobierno Federal, como hoy es el caso de los amigos del presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO)– siempre encuentran la manera de eludirlos o evadirlos.

La política fiscal en México debe cambiar para redistribuir mejor la riqueza nacional. Hasta ahora, ningún Gobierno Federal ha intentado aplicar una política tributaria progresiva con la que quienes ganan más, paguen más y que el dinero recabado sirva para cerrar la brecha más grande y escandalosa de la desigualdad social que hoy prevalece. Mientras no haya reglas claras que expliquen este objetivo, los ciudadanos de a pie tendremos que soportar una carga impositiva al gusto y capricho de los gobernantes, en tanto que ese dinero se destina a las clases sociales pudientes. Esto es precisamente lo que hoy hace el actual gobierno, que requiere toneladas de dinero para comprar votos; y su gran apetito por el dinero lo lleva a buscarlo hasta debajo de las piedras, pero sin molestar a sus amigos, los grandes empresarios. También resulta curioso ver cómo la verificación vehicular, impuesta para detener la contaminación ambiental de la Ciudad de México, se aplica igualmente en otras entidades, pero no con esta finalidad sino para que los gobiernos estatales obtengan más recursos fiscales. Ya veremos otras formas ingeniosas de exprimir a los ciudadanos, escandalosas como las aplicadas en la antigua Francia, que cobraron por el número de ventanas y puertas de los domicilios. La descomposición social que ahora vive el país es alentada por una clase gobernante, y preocupada más en ganar las elecciones que en dar solución a problemas de este y otro tipo, lo cual está propiciando la formación que en cualquier momento se salga de control. Cuando el peso es insostenible, únicamente hay dos opciones: o bien tira la carga o bien fallece el cargador… al tiempo.


Escrito por Capitán Nemo

COLUMNISTA


Notas relacionadas

El gobierno mexicano tiene un plan para sustituir las importaciones provenientes de China.

El programa educativo que cuenta con más recursos del gobierno es La Escuela Es Nuestra registra graves problemas de opacidad en los que podría haber actos de corrupción; sólo una de cada tres escuelas recibe apoyo.

La repercusión de la corrupción en el sector presenta un incremento final de entre el 5 y 10 por ciento de la construcción

“Alimentarnos con dudas disfrazadas de ciencia”, obra donde se afirma que, además de alianzas con políticos, hubo cómplices en centros de investigación para obstaculizar medidas recomendadas por la OMS.

Los colectivos que protestaron calificaron de “asesina” a la diputada federal del PAN, Teresa Castell, al tiempo que exigían procesar propuestas a favor de los derechos de su comunidad LGBTTTIQ+.

En su obra Desarrollo y libertad, él estudia con gran profundidad la relación dialéctica entre estos fenómenos, y nos enseña que no hay desarrollo sin libertad, y que libertad en pobreza es ficción.

En la plaza principal de Tecun Umán, en Guatemala próximo a la frontera con Chiapas arribaron esta mañana unos mil 200 migrantes que conforman el primer contingente de la caravana

En su guerra contra el Poder Judicial, es importante no dejarse engañar por el Presidente y los morenistas. Defendamos a la SCJN y al Poder Judicial como contrapeso necesario a este gobierno corrupto e incompetente.

Se trata de 845 jueces de distrito y magistrados de circuito quienes notificaron al Senado que no buscarán mantenerse en el Poder Judicial.

México registró un crecimiento anual de sólo 0.98 por ciento, el más bajo desde el sexenio de Miguel de la Madrid, ubicándose en el penúltimo lugar entre las economías de América Latina.

“Me parece que si el régimen empieza a perder digamos una opinión favorable, el Ejército también se va a ver afectada su legitimidad con la población", refirió Carlos Matienzo.

La decisión del Presidente es definitiva: nada puede tener prioridad frente a sus megaproyectos ni merece ser escuchado o considerado como una posible alternativa.

Trabajadores del Poder Judicial de la Federación bloquearon los accesos de la Cámara de Diputados para impedir que los legisladores sesionen.

Las últimas cifras oficiales demuestran que más del 50% de la población carece de vivienda; rentan o viven en casas prestadas; y gran número de familias vive en la calle.

Se espera que el próximo gobierno sexenal ahora sí se hará válido el lema de campaña, “por el bien de México, primero los pobres”, y no el que durante los seis años recientes practicó Andrés Manuel López Obrador (AMLO): “por el mal de los pobres, primero los ricos”.