En sus funciones de operador del capitalismo corporativo, el presidente de Estados Unidos (EE. UU.), Donald Trump, ha impulsado una campaña de terror con la que agrede a civiles mediante tropas de élite.
Cargando, por favor espere...
El terremoto de 7.7 grados ocurrido el pasado viernes en Myanmar (Birmania) aumentó la cantidad de fallecidos, hasta el momento, la junta militar que gobierna el país asiático reporta un total de dos mil 56 defunciones; asimismo, reportó más de tres mil 900 heridos y 270 personas desaparecidas.
Además, señaló que a tres días del movimiento telúrico disminuye cada vez más la esperanza de encontrar sobrevivientes entre los escombros.
Mientras tanto, el modelo de previsión del Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS, por sus siglas en inglés) estima que existe una probabilidad del 35 por ciento de que el número de víctimas se sitúe entre 10 mil y 100 mil personas.
De igual manera, los expertos temen que la cantidad de muertos supere la cifra estimada, a pesar de la movilización de la comunidad internacional para rescatar a las personas atrapadas bajo los escombros.
Aunado a lo anterior, señalan que las elevadas temperaturas del país asiático acelerarán la descomposición de los cuerpos, lo que podría dificultar su identificación.
Ante este panorama, las autoridades de Myanmar declararon una semana de luto nacional, por lo que las banderas ondearán a media asta en "señal de compasión por la pérdida de vidas y los daños causados por el violentísimo terremoto".
La Organización de las Naciones Unidas (ONU) advirtió el pasado sábado sobre una "grave escasez" de suministros médicos en las zonas afectadas; los equipos de rescate carecen de kits de traumatología, bolsas de sangre, anestésicos y otros medicamentos esenciales.
También, apuntó que las labores de socorro también enfrentan obstáculos debido a los daños sufridos en hospitales e infraestructuras sanitarias, así como en las carreteras y otras redes de comunicación.
Por su parte, la Federación Internacional de la Cruz Roja y la Media Luna Roja (FICR, por sus siglas en inglés) lanzó el pasado domingo un llamado urgente para recaudar 115 millones de dólares con el fin de asistir a las víctimas.
Finalmente, autoridades internacionales informaron que varios países mandaron ayuda: China anunció el envío de 82 socorristas y prometió 13.8 millones de dólares; un avión proveniente de la India aterrizó el sábado en Rangún con kits de higiene, mantas, alimentos y otros productos de primera necesidad; al igual que Corea del Sur y la Unión Europea.
En sus funciones de operador del capitalismo corporativo, el presidente de Estados Unidos (EE. UU.), Donald Trump, ha impulsado una campaña de terror con la que agrede a civiles mediante tropas de élite.
El ataque, atribuido a fuerzas ucranianas, dejó daños en edificios residenciales; autoridades habilitaron un refugio temporal para los afectados.
Los participantes eran “personas muy ricas”, aficionadas a las armas, que buscaban vivir “la experiencia extrema” de disparar sobre civiles indefensos.
Cayetana Álvarez de Toledo asegura que España derrocó una tiranía que practicaba el canibalismo.
Los manifestantes exigen una mayor acción climática y la protección de los bosques frente a la expansión de la agroindustria, la minería y la tala ilegal.
La medida es para asegurar la plena operatividad de las fuerzas y consolidar el comando, el control y las comunicaciones de la estructura militar.
Las negociaciones permanecen suspendidas, según Moscú, por falta de disposición de la parte ucraniana para reanudar el diálogo.
El Colectivo México Madrid informó que la manifestación se llevará a cabo el sábado 15 de noviembre a las 12:00 horas, frente a la sede diplomática.
La captura del Estado por las fuerzas más reaccionarias de Perú y Ecuador obedece al interés geopolítico del imperialismo.
El viceministro Serguéi Riabkov criticó el "despliegue injustificado" de fuerzas estadounidenses en el Caribe como fuente de "grandes tensiones".
El 3 de noviembre, Perú rompió relaciones diplomáticas con México.
La reforma fiscal entra en vigor antes de fin de año y busca “justicia tributaria”.
Desde el 2 de septiembre, el ejército estadounidense ha lanzado 16 bombas en aguas del Caribe y el Pacífico, dejando como saldo 67 personas muertas.
Sólo 17 de 88 pozos continúan operativos.
La decisión surge tras las recientes declaraciones de Donald Trump, quien ordenó al Pentágono “comenzar a probar” armas nucleares estadounidenses.
La crisis en el mercado del maíz
Más impuestos a los consumidores, no a las grandes empresas
Desempleo ahoga a la Gen Z: 8 de cada 10 jóvenes no encuentran trabajo
Lectura en crisis: México alcanza su nivel más bajo en hábitos lectores en casi una década
SEP anuncia vacaciones de invierno más largas para el ciclo escolar 2025-2026
En Puebla, olvido gubernamental a damnificados de las inundaciones
Escrito por Fernanda Trujano Chavarría
Licenciada en Lengua y Literatura Hispánicas por la UAEM.