Cargando, por favor espere...
En 2015, los estados miembros de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) aprobaron una nueva agenda ambiental integrada con 17 objetivos, por lo que se comprometieron a aplicar políticas públicas de desarrollo sostenible para cumplirlas en 2030. Entre los compromisos suscritos se hallan el combate a la pobreza y el hambre cero; la provisión plena de servicios de salud, educación, agua potable y energía no contaminante; la igualdad de género, el empleo bien pagado y el crecimiento económico. ¿Cuántos de estos compromisos se han alcanzado, y en qué nivel, cuando faltan menos de siete años para la fecha límite? Muy pocos o ninguno; incluso varios de los problemas se han agudizado. ¿Será que estos objetivos no son alcanzables? Sí, la mayoría son asequibles; pero mientras los líderes políticos solo asistan a las cumbres internacionales para tomarse fotos y no se apliquen (contra la injusta distribución de la riqueza en gran parte del orbe), nuestro planeta seguirá al borde del colapso comercial y ambiental.
En fecha reciente, la Secretaría de Educación Pública (SEP) del estado de Puebla emitió un programa ecológico; y para difundirlo, puso en circulación el cuadernillo Hacer las paces con la Madre Tierra, en el que sus autores incurren en los mismos errores folantrópicos de los ambientalistas: atribuir la causa de la contaminación a los habitantes en general; recomendar la siembra de arbolitos (cuyas copas únicamente servirán como aureolas de santidad para empresarios y funcionarios públicos) y ocultar a los mayores responsables del calentamiento global: las grandes empresas del capitalismo corporativo, cuyos propietarios solo se guían por la obtención de la máxima ganancia y no les importa el empobrecimiento de las clases trabajadoras ni la degradación de la naturaleza. Sí, el gran error del ambientalista es generalizar, hablar en abstracto y no tocar “ni con el pétalo de una rosa” el modo de producción.
Si bien es cierto que los ciudadanos pueden contribuir al combate de la contaminación, ya que su campo de acción como consumidores es limitado; y en el caso de los trabajadores pobres, aquél es aún más pasivo porque apenas pueden satisfacer sus necesidades debido a la creciente desigualdad que prevalece en muchos países del orbe. Por ello, la mayor responsabilidad para combatir la contaminación, los desastres naturales y las recientes olas de calor corresponde a los grandes capitalistas, porque son los principales generadores de estos problemas y porque cuentan con los recursos necesarios para la gran empresa de sanear el planeta, ya que los hogares más humildes no disponen de los medios ni de los recursos suficientes para realizarlos eficazmente. ¿Hacer las paces con la Madre Tierra? ¡Imposible! Eso no es probable porque tal solución no es un asunto de reconciliación; los seres humanos son conscientes desde hace muchos años de sus diferencias de clase y no pueden fraternizar de un año a otro o de una década a otra.
Sin embargo, el cataclismo global se vislumbra tan cercano que ha llegado el momento de que los trabajadores nos unamos, nos organicemos y apresuremos la lucha para cambiar las reglas del juego. Ha llegado el momento de crear un nuevo orden social en el que no solo la producción sea colectiva, sino también la distribución de la riqueza. Un mundo donde la producción sea benéfica para la humanidad y el medio ambiente es completamente posible. Ya no hay un mañana porque, para los pobres, como afirmó uno de los personajes de Cien años de soledad, la gran novela de Gabriel García Márquez, “no hay una segunda oportunidad sobre la Tierra”.
El gobierno del presidente López Obrador apuntalará el regreso a clases a costa de la salud de las familias mexicanas.
El capitalismo mundial está mostrando signos de crisis profunda y descomposición peligrosa. Efectivamente, la pandemia lo puso a prueba y no ha superado ésta como se esperaba.
Según estimaciones oficiales, al menos 600 mil estudiantes son afectados por la movilización docente, sin embargo, desde el ministerio de educación se niegan a negociar con el gremio.
Las medidas de López Obrador para "resolver" la escasez de agua, sólo exponen a un gobierno que trata de salir bien librado de la crisis, ya que no atacan de fondo el problema que, de no resolverse, se repetirá y crecerá con el tiempo.
La madrugada de este lunes Nuevo Laredo fue el epicentro de una balacera e incendios de vehículos, así como bloqueos de las avenidas principales.
En su informe de los primeros cien días de trabajo, Serrano Hernández informó que hubo un recorte para este año de 813 mdp.
El jefe de gobierno de la CDMX, Martí Batres, pretende despojar a los vecinos de Miguel Hidalgo de 18 módulos de seguridad recuperados por esa demarcación y con recursos del Presupuesto Participativo, denunció el alcalde Mauricio Tabe.
Las manifestaciones forman parte de la “Jornada Nacional de Movilizaciones. La Secretaría de Cultura que todos queremos”, informaron los sindicalizados.
Las fuerzas armadas de México realizaron 267 funciones civiles adicionales a las asignadas por la Constitución.
Entre 1962 y el dos de agosto de 2023, en México desaparecieron 290 mil 824 personas, 110 mil 106 de estos casos ocurrieron en el sexenio de AMLO.
El General Luis Crescencio Sandoval desprestigia al “Ejército mexicano poniéndolo en brazos del Presidente, ese Ejército que es de todos los mexicanos”, acusó Vicente Fox.
Así, el Covid-19 se convirtió en “arma secreta” de un sector que lucra y expolia en su nombre porque promueve políticas de odio y exclusión.
En su denuncia, el candidato de MC, Antonio Carbia, afirmó haber recurrido en diciembre pasado a las instancias electorales, debido a que al morenista Miguel Torruco “ya que se le hizo costumbre violar la ley”.
Los dinosaurios redujeron su tamaño para sobrevivir a su inminente extinción, como hoy de hecho lo están haciendo la mayoría de las industrias.
El reporte del CIDOC expone que “la pandemia de Covid-19 ha puesto de manifiesto que contar con una vivienda adecuada es un prerrequisito para mantenerse sanos y con vida”.
Escrito por Capitán Nemo
COLUMNISTA