Cargando, por favor espere...

Historia
Acción y discurso en la esfera pública
Hannah Arendt (1906-1975), filósofa e historiadora alemana.


Hannah Arendt (1906-1975), filósofa e historiadora alemana, quien, dada su condición de judía, cuya vida misma estuvo constantemente al límite, se acercó a plantear como preocupación la actividad humana en la esfera pública. Defendía la capacidad humana de la acción no a partir de la violencia, la coacción o el dominio, sino a través del discurso, de la persuasión entre los hombres. Eliminar esta acción esencialmente humana equivaldría a condenar a muerte a la humanidad.

Dadas estas premisas, Arendt advertía que los campos de concentración nazi no eran una necesidad ineluctable de la naturaleza humana, sino sólo una posibilidad ocasionalmente realizada. Durante el ascenso del nazismo observó cómo bajo una sociedad europea, cuyos avances civilizatorios eran evidentes, las convenciones y prácticas morales se “adaptaron” a la nueva situación de barbarie. Comprender cómo fue posible el totalitarismo a partir de dar cuenta de cómo se configuraron los elementos que cristalizaron en ello, fue tarea central en sus investigaciones.

Para llevar a cabo esta empresa, Arendt entiende la necesidad de observar las tendencias llevadas a cabo con el inicio del capitalismo, marco en el que emergió el nazismo. Situados en la modernidad; reconoce que la humanidad centró su actividad principal en la producción, llevándola a niveles nunca antes vistos. Este incremento en la productividad tendría que generar una progresiva emancipación que permitiría el tránsito del reino de la necesidad al reino de la libertad. Sin embargo, esta condición moderna trajo consigo que, en palabras de ella, la naturaleza asimilara a la humanidad.

Aunque en el fondo del planteamiento la filósofa distinguía el ámbito económico del político, considerado éste como autónomo y puro de toda materialidad, por ahora me interesa apuntar el papel que le asignó a la acción y al discurso. Para Arendt, la esfera política constituye el espacio donde, gracias a la acción y al discurso, los hombres pueden romper el ininterrumpido ciclo de la naturaleza, esto es, pueden dotarse de cierta estabilidad y distinguirse unos de otros. Para los griegos, todo el que estaba afuera de la polis, era aquel que se hallaba desprovisto no de la facultad del discurso, sino de la forma de vida en la que el discurso encontraba sentido a partir de la interacción entre los ciudadanos, pues la preocupación primera era hablar entre ellos.

Por lo que hace a la acción, la concebía como las actividades humanas implicadas en la esfera pública o política. Como tal, hace referencia a actividades en donde los hombres se tratan como iguales y diferentes, la acción se considera la actividad realizadora y más elevada de la humanidad. Así, la acción se puede considerar como lo “específicamente humano”. A partir de la acción, los individuos están facultados para iniciar algo nuevo, cada acto es irrepetible y tiene el potencial de cambiar el curso de los acontecimientos.

Dadas estas condiciones humanas, Arendt nos recuerda que, incluso en tiempos de profunda oscuridad, mientras haya humanidad, hay esperanza; interpreta la condición de sobrevivencia como una oportunidad para dar testimonio a las futuras generaciones sobre los peligros que implica la transgresión de los límites provocados por la humanidad: “aquel freno de emergencia, aquella actividad milagrosa que salva al mundo de la esfera de los asuntos humanos, de su ruina normal y natural se llama acción”.

Arendt estaba determinada a romper con el totalitarismo; para ello llamó a su comprensión y acción. Los macabros hallazgos en el Rancho Izaguirre o el atroz genocidio en Gaza por parte de las potencias imperialistas, sólo por mencionar los acontecimientos más recientes que nos gritan a la cara, son tragedias humanas que nos deben poner en acción, hablando entre nuestros iguales, pues son ellos quienes padecen los mismos dolores, tomando acuerdos conjuntos que desemboquen en una acción organizada hacia la ruptura absoluta de todo lo malo que nos rodea; sólo cumpliendo ese requisito recuperaremos nuestra condición humana. 


Escrito por Eneas Sánchez

columnista


Notas relacionadas

La farsa de la “izquierda” mexicana hoy

El verdadero futuro de la izquierda mexicana no se lo dará el juego electoral ni las luchas económicas por más que éstas beneficien a las grandes mayorías empobrecidas.

Una vida en la vida de México, de Jesús Silva Herzog

En Una vida en la vida de México se hallan trazos rápidos pero detallados de figuras como José Vasconcelos y los generales Francisco Villa, Eulalio Gutiérrez y Álvaro Obregón, entre otros.

Contra el relato oficial

Conocer la historia palestina y difundir las posturas en contra del relato oficial, son actos que contribuyen a desenmascarar a aquellos que buscan crear la ilusión de que el mundo debe ser según la forma que más les convenga.

Poemas a Lenin

En esta edición escogimos dos poemas para honrar la memoria del político y revolucionario aplicando la teoría a una acción práctica, más que loas y cantos, recordar a Lenin implica una constante labor por la liberación de los oprimidos del mundo.

El tesoro de Moctezuma, de Carlos Isla (II de II)

En la novela hay contenidos novedosos y muy atractivos, como es el caso de la relación de algunos de los hábitos culturales de los pescadores de Veracruz, Boca del Río y Mandinga.

Socialismo o barbarie (I/II)

¿Qué es el imperialismo y por qué nos referimos a él como encarnación de la barbarie? ¿Quiénes representan hoy en día las fuerzas de la reacción y la revolución? La respuesta a estas interrogantes será lo más breve y concreta posible.

Una corredora rarámuri que hace historia

Los rarámuris sufren terriblemente por la pobreza, la discriminación y marginación social de la que son víctimas.

La recepción del leninismo en México

“Nikolái Lenin, el líder ruso, es la figura revolucionaria que brilla más en el caos de las condiciones existentes en todo el mundo, porque se halla al frente de un movimiento que tiene que provocar ... la gran revolución mundial que ya está llamando a las puertas de todos los pueblos".

Escritos de Agustín de Iturbide (I de II)

La lectura atenta de estas páginas sugiere que el gran guerrillero Vicente Guerrero vio en Agustín de Iturbide y Arámburu un genuino sentimiento de nacionalismo mexicano.

La historia de la brujería, de Lois Martin (II/II)

En las cacerías de brujas de la Edad Media europea gran parte de las víctimas fueron personas de menores ingresos.

Sobre ¿Qué hacer?, de Chernishevski

Las reflexiones que hay en el ¿Qué hacer? de Chernishevski son de gran importancia porque intentan pensar de manera crítica las condiciones para la liberación.

El neoliberalismo que habéis matado goza de buena salud

El neoliberalismo como sistema político-económico se introdujo en nuestro país, derivado de procesos económicos mundiales, a principios de la década de los 80, iniciando con los programas de ajuste de Miguel de la Madrid.

Napoleón Bonaparte y los matemáticos

Durante el gobierno de Napoleón, Francia vivió una época brillante para la ciencia, se hablaba del Imperio de las Ciencias.

Roque Dalton y las propiedades “analgésicas” del comunismo

Dalton subraya en todo momento los conceptos “construcción” y “lucha”.

El deporte y su evolución (II/II)

El capital ha convertido al deporte en mercancía en torno a la cual giran inmensos negocios mundiales; hoy en día, a pesar de ser un derecho constitucional, apenas un 39% de los mexicanos tienen acceso al deporte.