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Huda Aldaghfag
En una de sus últimas colecciones poéticas aborda su labor como escritora ante el lector; uno de tales poemas se refiere a la muy conocida frase de la cultura árabe que reza: “el sentido se halla en el ombligo del poeta”.
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Nació en Magmaa, Arabia Saudita el cuatro de octubre de 1967. Poetisa, narradora, periodista y profesora. Licenciada en Lengua y literatura árabe en la Universidad de Riyadh en 1990. Es miembro de la Asociación Internacional de Prensa, ha laborado en la prensa saudita y ha sido una activista en pro de los derechos de las mujeres. Ha participado en diversos congresos sobre el tema de la mujer, las libertades y el periodismo, dentro de su país y en el exterior. Durante cinco años consecutivos participó en el prestigioso festival AlGanadriyah de Arabia, también ha representado a su país en festivales poéticos en Bahrein, Omán, Emiratos Árabes, Túnez, Egipto, Jordania y Suiza. En 2004, obtuvo el premio a la mejor actividad poética en Arabia. Ha publicado varios poemarios: La sombra hacia arriba (1993), Nueva pasión (2002) y El bosque de las mariposas (2005). Sobresale en la prosa poética, una forma no siempre celebrada en un medio cultural tan conservador como el que predomina en su país natal, pero que de todas formas es practicado ampliamente. En una de sus últimas colecciones poéticas aborda su labor como escritora ante el lector; uno de tales poemas se refiere a la muy conocida frase de la cultura árabe que reza: “el sentido se halla en el ombligo del poeta”, que se refiere a que sólo el poeta conoce el verdadero sentido de su poema.

 

BOSQUES

                 I

Distended vuestras sombras apresadas

y fluid, tiernos árboles,

anegad el pavimento,

vuestra emanación olerá el calor del Sol.

Pero mis ojos brillarán como lámparas,

su alegría reside en vuestros suaves murmullos que

danzan en la calma noche.

                 II

El árbol... sólo una rama

llora, llora, llora,

sus lágrimas se vuelven bosque.

                 III

La hoja, verde, me llama.

La hoja, si la llamo, es amarilla.

                 IV

La rama verde

se acerca, se acerca el negro rostro

de la tierra,

se acerca. ¿Por qué?

 

ÚLTIMO VIAJE

Así que el reloj de esta casa

es sordo.

Sus manecillas son labios mudos,

no le cuentan nada a su silencio.

El polvo desflora sus alas.

El reloj de esta casa

es una mariposa disecada.

Ella ha colgado en la ciega pared

su soledad.

 

ARBOLITO

Aquellas rocas se abrazan,

calman mis lágrimas cuando las oigo.

Contienen su volcán a través de las eras.

Su silencio es un deseo.

Aquellas rocas se abrazan,

tienen un arbolito en sus entrañas

que aún no aflora.

 

EL SIGNIFICADO

I

Ahora,

está en las entrañas de la calle.

En todas partes

degollado

de significar.

Vivo está

en el corazón del poeta.

 

II

Una bola de fuego

su leña eres tú.

Tu poema

¡Oh poeta!

No quema a nadie más que a ti.

 

SEMILLAS

Se agrieta esta madre

y el campesino no florece.

La pequeña crece;

en su extrema imaginación

brotan los poemas de cada día.

Brotan

mientras ella crece.

Crece

Crece

...y se la comerá la manta.

 

OLA

Paloma sola

aúlla

hasta

la última gota

de su lengua.

Su nido es el mar

ensalzando sus alas.


Escrito por Redacción


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