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En lo que se refiere a los programas de ayuda social que acaban de ser aprobados luego de una nueva consulta en la que participó menos del uno por ciento del padrón electoral, cabe decir que constituyen un importante motivo de justificadas interrogantes. En primer término, no se sabe si el presupuesto del año entrante tendrá capacidad para financiar todo lo prometido, hay, incluso, múltiples versiones que indican que el equipo del nuevo gobierno tiene diferencias precisamente porque “el dinero no alcanza”; en segundo término, hay incertidumbre, no tanto por los que van a recibir los apoyos a quienes seguramente algo ayudarán aunque sea temporalmente, sino por los que no van a recibir nada, es decir, por la población “objetivo” que es muy numerosa y habrá, por tanto, muchos que no alcanzarán nada y, finalmente, la duda mayor quizá consista en que programas muy similares han resultado anteriormente un fracaso y, como el dinosaurio del famoso cuento de Monterroso, la pobreza todavía está ahí.
“La Cruzada Nacional contra el Hambre -escribe esta semana el diario Reforma- se quedó lejos de cumplir con la promesa de acabar con la pobreza alimentaria del país… a seis años… más de 20 millones de mexicanos siguen sin poder acceder a los alimentos necesarios”. Los nuevos diez programas anunciados, las pensiones a los adultos mayores, las pensiones a discapacitados, las becas a los jóvenes y otras formas de distribución de dinero para mejorar un poco el gasto, no precisan en qué se diferenciarán de los costosos experimentos anteriores que no han disminuido la injusta distribución de la riqueza que es el verdadero cáncer que mina al país.
José Agustín Ortíz Pinchetti, uno de los comisionados para la elaboración de la Constitución moral, dijo que la elaboración de la misma estará inspirada en la Cartilla moral de Alfonso Reyes Ochoa, cuyo padre fue el segundo hombre más poderoso del porfiriato y cuya temprana cultura se debió a que fue educado en condiciones de privilegio muy poco comunes. Quizá por ello, el inspirador de lo que habrá de ser nuestra Constitución moral escribió en su Cartilla que “la moral de los pueblos civilizados está toda contenida en el cristianismo” ¿y los mahometanos? ¿y los budistas y judíos? ¿y los ateos? ¿son todos ellos inmorales? y, poderoso y arrogante como la clase hegemónica en la que nació y creció, dijo también: “Las normas o preceptos morales son los mismos para todos los hombres”.
Otra de las orquestadoras de la Constitución moral, Verónica Velasco Aranda dijo: “no se trata de una herramienta de carácter jurídico… tampoco se pretende normar la vida privada (entonces, ¿la vida pública?) ni instaurar un modelo autoritario de Gobierno, ni imponer ideas o mandamientos ciudadanos”. Entonces ¿para que va a servir? ¿Incluirá alguna idea moral con la que no estén de acuerdo los organizadores y redactores o, incluso, el presidente de la república? ¿Será considerado moral criticar a la autoridad? ¿disentir de ella incluso con manifestaciones en la calle? Por la forma en la que hasta ahora se ha reaccionado ante los críticos, no parece que la Constitución moral vaya a ser muy benévola con los disidentes. La verdad es que los mexicanos ya tenemos una norma de conducta básica, aceptada y reconocida por todos que contempla, incluso, sanciones a todo aquél que la transgreda y esa es la Constitución de los Estados Unidos Mexicanos que fue redactada y aprobada después de un sangriento conflicto armado que duró siete años por lo menos. Vamos a volver atrás. ¿Es la Constitución moral una nueva Carta Magna con seudónimo? Otro motivo de preocupación.
La semana comenzó en Michoacán con una noticia muy importante: el señor Gobernador Silvano Aureoles Conejo, rompe los convenios de pago de la educación estatal con la federación. "La intención -declaró el señor Gobernador- es dar por terminados los referidos convenios en un plazo de 30 días, contados a partir de hoy en que fueron ingresadas las respectivas notificaciones ante las instancias competentes, terminación que incluye el reintegro al Gobierno federal de los servicios de educación básica federales, así como los de fuente de financiamiento estatal". No se trata, pues, de ningún acuerdo con la federación sino una decisión unilateral “dar por terminado” e “ingresadas las respectivas notificaciones” fueron las expresiones que utilizó el Ingeniero Aureoles Conejo. Y por si cupiera alguna duda, en la versión del Diario Cambio de Michoacán, añadió “la parte federal no hizo su parte en cuanto a la entrega de recursos para solventar algunos puntos que marcaban dichos convenios”. Más claro no canta un gallo.
El estado de Michoacán renuncia a seguir pagando a los profesores y regresa ese compromiso al gobierno federal. ¿Qué va a pasar? Muy difícil preverlo, pero, a cuatro días de la entrada de la nueva administración federal, bien se justifica el título de este trabajo. En el estado de Michoacán ya se venía diciendo que el dinero no alcanzaba para terminar de pagar los compromisos contraídos con los profesores durante todo el año, que era necesaria una intervención extraordinaria -o sea más recursos- por parte del gobierno federal. La reacción anunciada indica que se negaron tales recursos extraordinarios. ¿Aceptará el gobierno federal cubrir esos compromisos? Hay quienes dicen que la solución del diferendo podría tardar hasta dos años ¿Cuántos estados tienen el mismo problema y quisieran transitar por la misma renuncia a los convenios?
El problema o, más bien, la grave agudización del problema que se cierne sobre los profesores que laboran en la Secretaría de Educación en el Estado (SEE), viene a añadirse al problema de la situación que ya vive el personal del Colegio de Bachilleres de Michoacán que ya no cobra a tiempo ni completo y tiene anunciado por su Director General que el déficit para terminar el año es superior a los 100 millones de pesos y viene a sumarse a la situación de la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo que apenas recibió un poco de oxígeno para liquidar quincenas de octubre y se sabe que ya no habrá más dinero para terminar el año.
No conviene ignorar la realidad: El problema es el modelo económico. Ese modelo que privilegia la máxima ganancia sobre cualquiera otra consideración, está destruyendo al hombre sumiéndolo en la pobreza y está destruyendo al planeta como lo constatamos con la grave situación de deterioro que presenta el lago de Pátzcuaro. Es indispensable y urgente atacar el problema gravísimo de la injusta distribución de la riqueza. Urgen empleos, buenos salarios y obras y servicios públicos en beneficio de las grandes mayorías de mexicanos y ello no va a lograrse si no se modifica la política fiscal, se no se hace renunciar a los grandes potentados que no pagan impuestos a una parte ínfima de sus ganancias para modificar en serio la acción del Estado sobre la economía. Si no hay condiciones objetivas, si no hay organización y conciencia populares, si ese momento no ha llegado, no nos espantemos de que la situación en México y en Michoacán, se siga deteriorando. Si no se atacan los problemas en su esencia, los remedios de los curanderos sociales no sirven para nada, como no sea para seguir engañando.
Manuel López Obrador “tiene que acatar en sus términos” la orden de un Tribunal federal de prohibir la ejecución de obras del Aeropuerto Internacional de Santa Lucía.
El sexenio de Andrés Manuel López Obrador acumuló 193 mil 612 homicidios dolosos.
El gobierno federal está pensando en que el PEF 2020, debe seguir respondiendo a la 4T; austeridad
La causa principal del fracaso del gobierno de AMLO es la falta de un programa económico sólido y viable, ya que su “proyecto” regala dinero mediante programas sociales, que no se fiscalizan ni se miden.
“De nueva cuenta queda en evidencia que la adquisición y uso de herramientas de vigilancia en México continúa fuera de control": R3D.
Pero es falso que la austeridad se deba al combate a la corrupción: eso lo desmienten tantos casos de escándalo en las altas esferas gubernamentales.
No hay duda, por último, de que cuando AMLO habla de moral, lo hace invocando la moral burguesa, la del poder político, la que controla la economía y las leyes, y no la moral humanitaria de las clases trabajadoras del pueblo mexicano.
Frente a esta cuádruple crisis, el gobierno de Morena evade su responsabilidad. En un insulto a la inteligencia, reitera que vamos muy bien y culpa al pasado, a “los de antes”.
López Obrador padece un complejo de inferioridad ante quienes tienen un alto nivel intelectual, académico, crítico y ético.
El presidente electo, Andrés Manuel López Obrador, destacó que existe la intención de lograr la unidad de los países de América del Norte y Centroamérica para enfrentar el fenómeno migratorio, a fin de evitar la militarización de las fronteras y atender l
"Los días en que las decisiones globales eran dictadas por un pequeño grupo de países han quedado atrás", cita la agencia a un portavoz de la embajada china en Londres.
Esta actitud del Presidente obedece al propósito de que la CFE retome el control de la producción de esta energía para hacerlo mediante el uso de combustibles fósiles.
En solo dos años, 2019 y 2020, la administración morenista se gastó 282 mil mdp (de 323 mil mdp) de los fondos de ahorro gubernamental, para garantizar el sostenimiento de sus programas sociales y varios de sus proyectos "estrella", como el Tren Maya.
Es decir, donde vaya, el presidente López Obrador no podrá tomar sana distancia del clima de ingobernabilidad que está generando y afecta ya las capas populares.
Hoy se vuelve a confirmar que la política de la 4T va en picada y solo es cuestión de tiempo para que entre en crisis y los mexicanos le cobren la factura.
Israel quema vivos a niños refugiados en hospital de Gaza
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¡Habrá licencias permanentes en la CDMX!
“AMLO no tocó al neoliberalismo; pobreza y desigualdad continúan en México”
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Escrito por Omar Carreón Abud
Ingeniero Agrónomo por la Universidad Autónoma Chapingo y luchador social. Autor del libro "Reivindicar la verdad".