Cargando, por favor espere...

Nuestra escuela pública
Los nuevos planes de estudio son apuntes obsoletos que se presentan como guía de una “educación popular”, pero en los hechos realmente se trata de continuar las directrices del neoliberalismo en la escuela pública.
Cargando...

La educación no debe ser un privilegio porque es un derecho imprescindible. 

La educación pública, laica y gratuita representa una de las columnas vertebrales de la Constitución General de los Estados Unidos Mexicanos y un derecho fundamental por el que al menos 40 mil personas murieron y muchas otras derramaron su sangre en la Revolución Francesa.

Es un derecho que, si se deja de ejercer, puede perderse fácilmente. La educación está necesariamente ligada al desarrollo de las personas y propicia, además del que se da en las familias, el primer contacto con el resto de la sociedad. Implica una confrontación con la realidad social y abre un camino alterno a la autoridad familiar, que en muchos casos desgraciadamente está llena de dogmas, irracionalidades y violencia.

La educación debería contribuir al conocimiento del mundo de forma libre e independiente; y el gobierno lleva esta responsabilidad a cuestas y debe garantizarla a cabalidad por mandato de las leyes que rigen el Estado. Desde 1988, en México se registra una verdadera agresión contra el derecho constitucional a la educación. Para desgracia de millones de estudiantes de todas las edades y niveles educativos, los daños en el ejercicio de la enseñanza pública se han incrementado.

Los recortes al presupuesto destinado a fortalecer el aprendizaje de infantes y jóvenes han sido cada vez mayores. Para este año no hay dinero destinado a la infraestructura educativa y recientemente fue eliminado el importante programa Escuelas de Tiempo Completo (ETC), que beneficiaba a más de tres millones de estudiantes.

Además, los planes y programas de estudio han sido agraviados notablemente. Delfina Gómez, la titular de la Secretaría de Educación Pública (SEP), informó que este mes continuarían las asambleas de consulta a la ciudadanía para elaborar un nuevo marco curricular, las que se realizan al modo de las “consultas populares” del presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO), que son una farsa y tienen el objetivo único de disfrazar sus ocurrencias.

El pretendido nuevo marco curricular ya se estableció (puede descargarse en https://bit.ly/3sFQFC5); y en las consultas a las masas lopezobradoristas solo se vota a su favor, de acuerdo con Marco A. Fernández, especialista de México Evalúa.

Los nuevos planes de estudio son, en buena medida, apuntes obsoletos que se presentan como guía de una “educación popular”, pero en los hechos realmente se trata de continuar las directrices del neoliberalismo en la escuela pública.

Pero eso no es lo más grave, sino la ausencia de raciocinio en la nueva estrategia de enseñanza: se plantea, por ejemplo, que la estructura curricular de los planes de estudio aún vigentes sea eliminada porque es fragmentaria y que, por tanto, divide al conocimiento y desemboca en la incapacidad de conocer la realidad integralmente.

Esta argumentación es absurda y resulta difícil creer que los especialistas de la SEP no sepan que para el conocimiento objetivo de la realidad es necesario que primero haya un análisis y que para ello es imprescindible que la enseñanza sea a través de múltiples materias, desde diversos campos de la realidad porque se conjuntan abstractamente en el cerebro humano. 

En este espacio no caben todas las falacias contenidas en el plan de estudios 2022, además de que ése no es el objetivo. Pero es conveniente recordar que la educación debe adecuarse a las necesidades de conocimiento de la sociedad, que cambian continuamente y que es necesario buscar un patrón eficiente para evaluar la enseñanza.

Este sistema de evaluación tendría que ser creado por especialistas reconocidos y no por pretenciosos mercenarios que actúan como compinches del gobierno actual y que no están realmente preocupados por la formación educativa y cultural de ciudadanos críticos, pues solo los ocupa la ambición irracional –disfrazada de transformación– de causar estragos a un derecho que costó muchos años y la sangre de miles de actores políticos.

Una sociedad que pierde los pilares de la enseñanza pública se dirige hacia el abismo y todo parece indicar que hacia allá nos conducirá este gobierno si no somos capaces de ponerle un alto.


Escrito por Betzy Bravo García

Investigadora del Centro Mexicano de Estudios Económicos y Sociales. Ganadora del Segundo Certamen Internacional de Ensayo Filosófico. Investiga la ontología marxista, la política educativa actual y el marxismo en el México contemporáneo.


Notas relacionadas

El martes 9 de enero regresarán a sus clases más de 90 mil estudiantes del Colegio de Bachilleres, luego de más de dos meses de huelga.

La ASF advierte que en 2021, cuando Delfina Gómez era titular de la SEP, se habría incurrido en varias irregularidades en el programa “La Escuela Es Nuestra”, que incluyen entrega de recursos a padres de familia ya fallecidos.

Los esquemas de transferencias en efectivo a los estudiantes pueden resultar de ayuda, de ninguna manera resuelven el problema de calidad y cobertura del sistema público de educación.

El gobierno federal prepara un incremento de entre 50,000 y 100,000 pesos para los planteles educativos que forman parte de la Escuela es Nuestra.

La “estrategia” consiste en cinco recomendaciones genéricas, sin detalles y, sobre todo, sin mención sobre las carencias de infraestructura y equipamiento de las escuelas, entre muchas otras faltas.

Especialistas afirman que los nuevos libros de texto serán un medio de adoctrinamiento, un instrumento político e ideológico; la prueba de esto es la modificación de la historia a conveniencia del gobierno de la 4T.

Investigadores coinciden en que si se llega a imponer el nuevo modelo educativo, no traería nada positivo, por el contrario, sería catastrófico para la educación mexicana; ya que la propuesta carece de diagnósticos y se basa sólo en ideas del Presidente.

CDMX Prevé el retorno de un millón 700 mil alumnos de educación básica.

Con su nuevo Plan educativo, Delfina Gómez y la SEP no hacen un balance de la situación actual de la educación y lo que realmente necesita México. Nada plantea, por ejemplo, cómo se evitaría la deserción escolar de más de 600 mil estudiantes.

La FNERRR demandó a la SEP atienda con prioridad a dichas instituciones, ya que, continúa el regreso a clases presenciales impuesto por el presidente Andrés Manuel López Obrador.

"Está en riesgo entre el 20 y 25 por ciento de las 47 mil escuelas particulares que hay a nivel nacional en todos los niveles", declaró.

Los alumnos regresarán a clases el jueves 9 de enero de 2025.

Diversos especialistas en el tema, maestros, politólogos, ex funcionaros de educación, coinciden en que el nuevo modelo educativo que López Obrador quiere aplicar al país no son más que una serie de disparates cargados de ideología.

El CIEP ha detectado que no todas las escuelas, sobre todo públicas, reúnen los requisitos necesarios para la reincorporación de los alumnos.

El gobierno estatal informó que del 3 al 7 de agosto se llevará a cabo la sanitización de escuelas y capacitación del personal para regresar a la llamada nueva normalidad.