Cargando, por favor espere...
Casi a la mitad del sexenio del gobierno de Andrés Manuel López Obrador (AMLO), el país se cae a pedazos por la falta de oficio político de los principales dirigentes de Morena. En plena campaña electoral ante los comicios de junio próximo, México sufre los estragos de la pandemia de Covid-19, que ha provocado ya medio millón de muertos y casi dos millones y medio de contagios. El virus se ha ensañado con los mexicanos porque el gobierno no se previno adecuadamente; entre sus acciones tardías destaca la falta de atención al personal sanitario que, desde el principio, hace lo que puede sin el apoyo oficial. La campaña de vacunación avanza lentamente debido a su muy mala estrategia de operación; solo cuatro millones de personas han sido vacunados con dos dosis, cifra equivalente al 3.2 por ciento del total de la población.
El Presidente y el partido oficial están destruyendo a México. La pobreza ha entrado a los hogares de más millones de mexicanos; y la falta de recursos económicos en las familias ha incrementado el empleo informal en gran parte del país; la inseguridad pública y la violencia delictiva generan terror en la población y el gasto público en salud, educación e infraestructura urbana básica ha disminuido sustancialmente.
Palacio Nacional se ha convertido en el escenario de una comedia televisiva que se trasmite de lunes a viernes; “la estrella” usa su púlpito para promover su agenda política y arremeter contra sus enemigos o adversarios como él los llama. En ese escenario responde preguntas de reporteros de medios de comunicación poco conocidos, pero “amistosos”; en tanto que los periodistas independientes e “irritantes” –como ocurre con los de los diarios Reforma y Latinus– son apartados, desoídos y condenados de palabra.
La falta de solución a los graves problemas socioeconómicos de México comienza a irritar a la población, como se advierte en el silencio mayoritario de la gente, en el que quizás haya algún presagio. ¿La razón? Casi a la mitad de su mandato, AMLO se ha dedicado a la autopromoción en vez de abordar los problemas que ofreció resolver; estos problemas figuran en sus folclóricos discursos, pero como parte de las 80 mentiras diarias que emite en sus conferencias matutinas.
AMLO identifica los problemas que perturban a la sociedad y está consciente de que las elecciones del seis de junio pueden convertirse en el tribunal que juzgue su mal gobierno; por ello ha decidido jugar al autoritarismo y dirigirse hacia una dictadura, marcando a cada paso el deslinde “estás con nosotros o contra nosotros”; por eso no soporta ninguna crítica.
Nathaniel Parish Flannery, analista político y escritor especializado en asuntos de América Latina, escribió en la revista Forbes que “algunas de sus luchas (de AMLO) se pueden atribuir a la arrogancia, la incompetencia, la ignorancia o la inexperiencia. Pero lo preocupante de López Obrador es que exige adulación y conformidad ideológica de sus aliados y simpatizantes. Muestra poco interés en aprender de sus errores. Como líder, tiene un enfoque implacable e inquebrantable en la consolidación del poder y poca ambición por ejercer el poder que ya tiene”. El politólogo agrega que “AMLO elige enfurecerse en lugar de comprometerse. Evita el difícil proceso de reformar y fortalecer de manera significativa las instituciones de México. Casi tres años desde que fue elegido para comenzar su histórica presidencia, López Obrador continúa haciendo campaña en lugar de gobernar”.
El Presidente es una amenaza para la democracia mexicana; propicia la violación de los derechos humanos y estigmatiza a los organismos autónomos, como el INE. Muchos mexicanos soportan en silencio hambre, injusticias, pobreza y miseria extrema, pero este silencio no ayuda. La ilusión de la 4T como “la esperanza de los pobres contra los desmanes de los ricos”, se ha diluido en poco tiempo; hoy, la única forma de evitar que México se fracture a causa de la incompetencia, ocurrencias y gracejos de Morena es la organización política del pueblo para dejar de ser polvo humano y convertirse en voluntad, en una roca con la fuerza y la capacidad necesarias para decir no al autoritarismo en los comicios de junio. Ya es hora de que todos, al unísono y con voz estentórea, defendamos nuestra sagrada libertad y luchemos por una verdadera democracia donde sea el pueblo el que elija a sus representantes y los funcionarios públicos tengan verdadera vocación de servicio.
Durante la gestión de Alfonso Durazo Montaño, quien coordinó el gabinete de seguridad, se registró la cifra más alta de muertes violentas en lo que va del sexenio.
El que acusa tiene que probar y el mandatario nacional nunca ha podido probarle nada a ninguna organización.
Un documento del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) revela que México pidió un préstamo por 600 millones de dólares para el “Programa para Mejorar la Calidad del Empleo en México II”.
Atribuyó el aumento en homicidios a la persistencia de grupos criminales, especialmente a cárteles del narcotráfico.
La propuesta refiere que se mantiene y extiende la figura del arraigo para todos los delitos y no solo para delincuencia organizada.
El PAN argumentó que durante su conferencia el presidente AMLO hizo comentarios que vulneran los principios de imparcialidad.
Hemos visto cómo el retraso en las acciones en la prevención puede traer un "contagio" mayor de lo que se prevé.
Me atrevo a pensar, no estarían en contra de que alguien se reeligiera en algún puesto, siempre y cuando los gobernantes fueran buenos y hubieran trabajado en favor del pueblo.
A 100 años de la muerte de Emiliano Zapata, su causa y el motivo que llevó a su lucha, aún siguen vivos
En la CDMX, al menos 41 por ciento de la desigualdad económica se debe a que no todos los citadinos tienen las mismas oportunidades para salir adelante.
El INE –dijo-, es el órgano constitucional que tiene como mandato expreso organizar los procesos electores.
Las campañas políticas previas a las elecciones del dos de junio transcurren en un ambiente de violencia pocas veces visto; actores de perturbación son el crimen organizado y algunas autoridades del Gobierno Federal.
La centralización del poder practicada por el Presidente de la República atropella y coarta los derechos de los mexicanos más pobres; incluso, lo más lamentable, la aplican también algunas autoridades estatales y municipales.
Contra toda lógica, desde la prepotencia del gobierno, la petición fue ignorada, abandonando a millones de personas que no tienen para comer.
En un desplegado difundido este día con el título “En defensa de la libertad de expresión” coincidieron que la libertad de expresión en México está bajo asedio.
Escrito por Miguel Ángel Casique Olivos
Colaborador