Cargando, por favor espere...

Mosaico cultural
El azul
La historia del color azul en el arte es curiosa. No sólo ha ocupado un lugar central en la música o la poesía, sino también en la pintura. En la cotidianeidad es tal vez el color que más vemos.


La historia del color azul en el arte es curiosa. No sólo ha ocupado un lugar central en la música o la poesía, sino también en la pintura. En la cotidianeidad es tal vez el color que más vemos, pues el azul es el color que vemos en el cielo, siempre que no amenace tormenta, por supuesto.

Por la continuidad azul que nuestros ojos ven, podría esperarse que todas las lenguas, o por lo menos los grandes relatos de sus pueblos, contaran también con referencias a este color. Sin embargo, no sucede esto. En la Ilíada de Homero no hay una sola referencia al color azul, a pesar de descripciones detalladas con colores, por ejemplo, “la aurora con sus sonrosados dedos”, o de que el blanco se encuentra 100 veces, el negro 200, el rojo unas 15 y unas 10 el amarillo y el verde. También en los primeros escritos de antiguas civilizaciones, como el Corán, la primera Biblia hebrea, las Vedas indias, sagas islandesas o viejas historias chinas, no hay constante referencia al azul.

La ausencia en estos textos de un color tan constante contrasta con los textos de nuestro tiempo. En la literatura nuestra se puede encontrar una referencia a este color con Rubén Darío. El poeta nicaragüense nombró Azul al libro de poemas y cuentos con que fundó el modernismo. Pero la fascinación de la poesía por este color también puede encontrarse en Bécquer, Torres Bodet, José Othón, Neruda, Machado, López Velarde, Storni… por nombrar sólo algunas de las plumas hispanoparlantes.

Para la pintura, llegar al azul tampoco fue sencillo. Las primeras obras pictóricas que cuentan con azul son egipcias. Entre los siglos II y III a. C., el pueblo egipcio encontró una fórmula para el azul, consistente en mezclar sílice, cal, cobre y un álcali; curiosamente, también fueron una de las primeras culturas en reservar una palabra para este color. Tras la caída del Imperio Romano, el azul de los egipcios cayó en desuso y la fórmula para su creación fue olvidada; la pintura del medioevo y el renacimiento debió recurrir a otras prácticas para obtener azul.

El azul de esta época para la pintura se obtenía de una piedra preciosa llamada lapislázuli; acceder a esta fuente era demasiado caro, pues su veta se encontraba en Afganistán y, para llegar a ella desde Venecia, por ejemplo, se debían recorrer cinco mil 600 kilómetros. La exclusividad de su acceso hizo que su uso se redujera a motivos religiosos o reales, pues solamente la Iglesia y la realeza podían pagar este color. El azul fue, en esos años, utilizado para el velo de la virgen, o en retratos de poderosos reyes. Había un azul más barato, pero caro de cualquier forma, el azurita, que se usó para pinturas menos importantes. Fue el azar el que dio a la pintura el azul sintético, el primer color sintético de nuestro tiempo. A este azul se le conoció como “azul de Prusia” y fue una revolución en la pintura, protagonizando grandes cuadros como La gran ola de Kanagawa (Hokusai) o los creados por Picasso en su periodo azul.

Para nuestro lado del mundo acceder al azul no era difícil. Podemos encontrar este color a montones en el arte maya, por ejemplo. El azul de los mayas era de origen vegetal, mezclaban añil con atapulgita (una arcilla blanca). La llegada de España a América llevó al viejo continente un azul mucho más accesible para cualquier artista.


Escrito por Jenny Acosta

Maestra en Filosofía por la Universidad Autónoma Metropolitana.


Notas relacionadas

Economía y ética

La sociedad actual genera indiferencia hacia el dolor ajeno, una alarmante deshumanización, que hace posible que muchos contemplen en silencio un crimen, como dijo Martí, sin inmutarse.

AMLO no supo gobernar y Morena se devalúa

AMLO saldrá bien librado de los malos resultados en casi todos los rubros de su desgobierno, pero la sombra de las miles de víctimas del Covid-19, del crimen organizado y desapariciones lo perseguirán hasta donde vaya.

¿Y así quieren los gringos darnos lecciones?

Los personajes de CSI, Bones y Eliot Ness son sólo fantasías: la realidad es ésta que hoy hemos visto.

El obrero y la máquina

L as máquinas fueron construidas para facilitar el trabajo del obrero.

Las grandes entrevistas de la historia, de Christopher Silvester (II de II)

Un amplio muestrario de fobias, megalomanía y misantropía. En 50 de los 60 textos reunidos en este libro saltan a la vista muchas de las manías de políticos, escritores, científicos, tecnólogos, actores de cine y delincuentes famosos como Al Capone

El imperialismo, desarrollo y dominio mundial

El avance de las fuerzas productivas determina el arreglo histórico de la organización general de la sociedad.

Crisis y reconstrucción de la izquierda en América Latina (II/II)

El abandono del marxismo por parte de los partidos de izquierda después de la desintegración de la Unión Soviética tiene hoy sus amargas consecuencias en América Latina.

¿Desde cuándo existe el número π?

El número más famoso en la matemática es el llamado pi, denotado por π.

La estructura tributaria de México, ¿Quién paga y cómo se gastan los impuestos?

Se afirma frecuentemente que en México son los estratos sociales más bajos los que pagan la mayor parte de los impuestos.

Soluciones de mercado a problemas sociales

El mercado se ha convertido en fuerza sobrenatural; como dicen los clásicos, a semejanza de los dioses olímpicos, creados por los propios hombres y después temidos por ellos.

Aquiles Córdova Morán: La crisis terminal del capitalismo (primera parte)

Para mayor realce, esta obra no se circunscribe a un análisis coyuntural: es la visión de toda una época histórica, de sus raíces y perspectivas: el fin del imperialismo.

“También hay dioses en la cocina”

Las contribuciones de Heráclito al pensamiento filosófico no se pueden exponer profundamente en un texto como el presente, pero sí es posible recuperar una, aquella que se condensa en este título.

Crisis agrícola y dependencia alimentaria

Mientras no se reviertan las deformaciones de la estructura productiva no podrá alcanzarse la soberanía alimentaria. Y ello no se logra formando dependencias decorativas o comprando votos, sino con transformaciones profundas.

La miopía de Occidente

Las recientes acciones de las fuerzas armadas ucranianas en la región de Kursk muestran que el régimen de Zelensky, en su desesperación y en la anticipación de un inevitable colapso.

Los tres casos donde la doctrina del shock en América Latina apostó al éxito y perdió la partida

Ahora el nuevo presidente argentino, Javier Milei, pone sobre la mesa el "déjà vu" de una solución que considera exitosa a pesar de lo que arroja la historia.