Cargando, por favor espere...
Además de los consabidos mecanismos económicos de extracción de plusvalía de las clases empobrecidas, a saber, la explotación laboral, existen mecanismos extraeconómicos como la expropiación de medios de producción, como la tierra, y extracción de recursos mediante el crédito al consumo. En este artículo arguyo que la acumulación extraeconómica de capital se afianza ferozmente en el capitalismo mexicano, principalmente a través de los microcréditos y los intereses leoninos que extraen de los bolsillos de los más pobres en el país.
El crédito al consumo es por supuesto sólo una de las dimensiones de la acumulación no económica que implica a la población excedente al capital, empleada sobre todo en el sector informal; existen otros como la desposesión directa de los medios de trabajo de los pequeños productores rurales y urbanos.
La economía informal y la población excedente al capital en ella empleada son el resultado de muchos intentos, en las últimas décadas, de acelerar y completar el proceso de desarrollo capitalista mediante la expansión de las relaciones asalariadas en todo el país. La implantación del modelo neoliberal y las subsecuentes olas de reformas neoliberales buscaron ampliar las fronteras de acumulación de capital, aunque sus resultados están a la vista: una economía dual a mitad de camino entre una moderna economía capitalista y la persistencia de formas de producción que no precisamente podríamos llamar capitalistas, como los autoempleados o pequeños productores independientes.
En esta sociedad jánica o de dos caras, la mayoría de la población ha sido desposeída de sus medios de producción, pero no convertida en proletarios en toda regla. Pertenecen a la llamada economía informal, un espacio de la economía que proporciona subsistencia a los subempleados y desempleados.
El excedente de población ciertamente contribuye a la acumulación de capital. Un mecanismo es a través de la industria crediticia. En su libro sobre el endeudamiento y la industria de las microfinanzas en México, Susanne Soederberg muestra cómo algunos bancos e instituciones de microfinanzas (IMF) han estado extrayendo valor de los pobres con la ayuda del Estado. México es hogar de algunas de las IMF más exitosas del mundo, como Compartamos Banco, Banco Walmart y múltiples Sociedades Financieras de Objeto Múltiple o SOFOMES.
Aunque, discursivamente, estas instituciones y sus patrocinadores financieros afirman que pretenden brindar acceso financiero a personas no bancarizadas. En realidad se aprovechan de sus clientes ofreciéndoles préstamos y créditos a una tasa de porcentaje anual (APR) exorbitante que oscila entre 110 y 195 APR, según la misma autora. En esta misma línea afirma que el credo neoliberal detrás de la expansión de la iniciativa de inclusión financiera solía ser la supuesta idea de que las microfinanzas potenciaban el crecimiento económico; hoy en día hay consenso en que el vínculo entre estas dos variables es más que problemático.
Soederberg sostiene que este proceso de acumulación impulsado por la deuda no es más que una respuesta a la falta de otras oportunidades rentables para el capital internacional en sectores distintos del propiamente financiero. El capitalismo mexicano ha alcanzado un equilibrio de bajo crecimiento y productividad y una población considerable como resultado de un cambio de modelo de desarrollo articulado con el capitalismo global orientado principalmente a las exportaciones, contrapuesto a un desarrollo cuya prioridad sea el desarrollo doméstico.
Los trabajadores informales son, naturalmente, presa fácil de esta industria rapaz por sus condiciones sociales en términos de bajo nivel educativo, escasa información y falta de colaterales para acceder a la banca formal.
El excedente de la población en el sector informal pasa a manos de capitalistas mediante el pago del principal y los altos intereses sobre este monto que obtienen de prestamistas a los que tienen acceso. Su acceso a estos arreglos desventajosos no es voluntario, más bien no existen otras alternativas a su alcance.
En conclusión, si bien muchos trabajadores no asalariados no transfieren valor excedente a los patrones capitalistas mediante su trabajo directo, sí lo hacen de manera indirecta al valorizar el capital consumiendo mercancías y al participar involuntariamente en la industria del crédito al consumo.
Desde abril, la Junta Directiva de la Comisión de Puntos Constitucionales aprobó el dictamen para disminuir la jornada laboral; pero, no logró pasar al pleno.
La democracia que vivimos se ha mostrado francamente incapaz de seleccionar para los más altos puestos de la nación a hombres eficaces
Los Cabos, uno de los cinco municipios de Baja California Sur donde existen bolsones de pobreza y pobreza extrema conviviendo con todas las calamidades que éstas traen consigo.
Hoy, la burguesía nos hace creer que existe igualdad, y lo inscribe en la ley, mas en el fondo la exclusión perdura, ya no legal, sino económica, pues ejercer los derechos requiere cierto nivel de ingreso y educación política.
Beneficiarios de los Comedores Emergentes en Tlalpan protestaron porque se dejó de surtir alimentos, lo que afecta a más de 500 familias que acuden a diario por comida.
En fecha reciente, sobre todo cuando se celebró el Día Internacional de la Salud Mental, se presumió que próximamente se brindará este servicio a los trabajadores para que gocen de mayor bienestar.
La agraviante pobreza y el desempleo se expanden y la riqueza se concentra en unas cuantas fortunas.
San Cristóbal de las Casas es famosa por su turismo, pero también porque es la región con mayor consumo de Coca-Cola en el mundo.
Es así como el dinero desempeña muy bien la función de aparentar una libertad de los trabajadores que, en los hechos, no existe y contribuye a falsear la realidad cotidiana.
Demandan se encuentran obras de infraestructura básica como pavimentación de caminos y centros médicos.
Trabajadores de la empresa Contitech decidieron formar un sindicato debido a la falta de atención de la empresa a sus necesidades.
La pandemia de coronavirus (Covid-19) ha evidenciado el grave abandono socioeconómico en el que viven cientos de miles de jornaleros y jornaleras en el país.
Los mexicanos han sido pacientes en estos años; pero la pandemia de Covid-19 y las políticas fallidas y reaccionarias de la 4T, los ha llevado a una situación de sobrevivencia. Para entender la gravedad hace falta ponerse en los zapatos de los miembros de
La explotación de las mayorías es una condición "sine qua non" para el capitalismo; sólo al eliminar la explotación y las injusticias de este sistema cualquier persona podría no depender de la necesidad de trabajar para subsistir, es decir, ser ciudadano.
El nuevo sexenio empezará pronto, las graves carencias que aquejan a la población trabajadora ahí siguen y ahí seguirán.
Toma protesta nuevo director de la DICEA en Chapingo
A huelga 28 preparatorias de la CDMX
Hallan 249 fosas clandestinas en Colima durante gobierno morenista
UAM supera a IPN en ranking de las mejores universidades de México
Andaba en Miami de ilegal, detienen a excontralor de Hidalgo
La 4T asfixia a bibliotecas de México
Escrito por Arnulfo Alberto
Maestro en Economía. Candidato a doctor por la Universidad de Massachusetts Amherst, EE.UU.