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En junio de 1893, el escritor francés Emile Zola (1840-1902) aceptó hablar de su obra con el periodista V. R. Monley del diario británico Idlex, entrevista en la que abordó varios asuntos y en la que reveló cómo hallaba, ideaba y contaba las historias de sus textos de ficción. También dijo que fue influenciado por sus pares Honoré de Balzac y Víctor Hugo en la definición de la corriente literaria naturalista que más tarde se le atribuyó y fue denominada realista. Zola fue autor de 30 novelas, de las cuales las más conocidas son Naná (1880), Germinal (1885), La bestia humana (1890) y El desastre (1892). Las líneas siguientes corresponden a la respuesta que dio a Monley a la pregunta de cuál era su método de trabajo:
“Verá usted, nunca preparo una trama, No puedo hacerlo. A menudo he intentado dedicar horas a meditar sobre el tema. Entierro la cabeza en las manos, cierro los ojos y pienso en ella hasta volverme loco, pero no hay modo. Finalmente me doy por vencido. Lo que hago son tres tipos de apuntes para cada novela. El primero lo denomino esbozo. A saber, fijo la idea principal de la novela y los elementos necesarios para desarrollar la idea en cuestión. Establezco también ciertas conexiones lógicas entre una serie de hechos y otra.
“El siguiente dossier contiene un estudio del carácter de cada personaje. En el caso del protagonista incluso voy más allá. Investigo el carácter del padre y de la madre, su vida, la influencia de sus relaciones en el hijo. Sigo con el modo como ha sido educado, su etapa escolar, su entorno y amistades hasta el momento en que lo he introducido a mi obra. Me mantengo en la medida de lo posible próximo a la naturaleza e incluso tomó en consideración su aspecto, su estado de salud y su herencia biológica.
“Mi tercera preocupación es el estudio del entorno en el que pretendo situar a mis personajes, la localidad y el lugar exacto donde puede transcurrir cierta parte de la acción. Investigo las costumbres, los modales, el carácter, el lenguaje, aprendo incluso la jerga de los habitantes de esos sitios.
“Con frecuencia hago bocetos a lápiz y calculo las dimensiones de las habitaciones. Sé exactamente dónde están colocados los muebles. Por último, me familiarizo con el aspecto de tales alojamientos de día y de noche. Tras recopilar laboriosamente ese material me pongo a trabajar con regularidad todas las mañanas y nunca escribo más de tres páginas diarias.
“–¿Cuánto tiempo le lleva eso?”
“–Bueno, no mucho. El tema está tan vívido que el trabajo avanza despacio pero ininterrumpidamente. De hecho, rara vez hago alguna tachadura o corrección. Una vez escritas las páginas, las dejo a un lado y no vuelvo a mirarlas. A la mañana siguiente retomo el hilo y la historia avanza hacia su desenlace mediante una progresión lógica”.
Esta colección de ensayos políticos fue escrita para recoger, describir y evaluar lo que el propio autor llamó las “actas de los ideales colectivos” que el pueblo mexicano generó para sacudirse el colonialismo español.
Es una relación detallada de los ilícitos de mayor dimensión cometidos por la burocracia más cercana al expresidente de Argentina, Carlos Menem.
Tuqan ha sido descrita como una de las tres grandes poetisas árabes de la poesía moderna junto a la iraquí Nazik Al-Malaika y la jordano-palestina Salma Jayyusi.
En su "Elegía por cincuenta toneladas de patatas", el poeta denuncia la destrucción de los alimentos que habrían salvado de la muerte a miles de niños, mujeres y ancianos que se debaten en el hambre y la miseria.
Yo, el gato es una sátira social de un Japón cambiante, convulso y moderno. Sus personajes aparecen bajo la mirada crítica de un gato anónimo, testigo mudo que con su silencio y su mirada cristalina y ávida, inquieta a los humanos.
Este libro cuenta la historia de amor nostálgico de Antonio José Bolívar Proaño por Dolores Encarnación del Santísimo Sacramento Estupiñán Otavalo, su esposa, fallecida varias décadas antes.
Es la primera novela de una revolucionaria de origen irlandés.
Este hombre fue un genio que no solo nos dejó cuadros maravillosos, sino un ejemplo de lo uno puede hacer cuando verdaderamente encuentra su anhelo de vivir.
Esta novela tiene como escenario el tercer periodo de gobierno del general Charles de Gaulle, en Francia, en los años 60.
Considerado el más famoso poema de Abelardo "Lalo" Delgado, este poema denuncia el desperdicio de talento de tantos migrantes, debido a que están condenados a la degradación y la violencia en una sociedad que los oprime.
En la obra "Nuestra Señora de París", el autor aborda un tema que da motivo a este artículo: los criterios estéticos de la ética, con Quasimodo como expresión de la fealdad, y la sociedad, que lo enjuicia por eso.
Son historias de viajeros que por motivos de conquista económica, política, religiosa, curiosidad científica o espíritu de aventura visitaron otras regiones del mundo donde hallaron paisajes, edificaciones y grupos humanos diferentes a ellos.
Tratándose de los gustos literarios de Marx, Mijaíl Lifschitz menciona que se sabe que en su familia se leía con especial cariño la novela El pequeño Zaches de E.T.A. Hoffmann. ¿Por qué podía interesarle una historia como ésta a Marx? Te cuento.
Su obra ha sido incluida en diversas antologías y traducida a varios idiomas.
En una parte de su libro, Susan George hace este llamado a los antropólogos: “los necesitamos, pero no en Sudamérica, sino en Dakota del Sur y en Oklahoma. Necesitamos un trabajo científico serio sobre la cultura tribal de los habitantes del país que sigue siendo el más poderoso de la Tierra...
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Escrito por Ángel Trejo Raygadas
Periodista y escritor.