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México es uno de los países con ingresos más desiguales en el mundo. La desigualdad social, la diferencia abismal existente entre los ingresos de ricos y pobres, no tuvo freno a lo largo del siglo pasado ni lo ha tenido en lo que va del presente; por lo tanto, la diferencia en las condiciones de vida de esos dos sectores también ha sido extrema. Durante los tres años y medio que lleva al frente del país el gobierno autonombrado de la “Cuarta Transformación” (4T), la brecha entre ricos y pobres se ha ensanchado, a pesar de que una de las banderas que hicieran triunfar al partido gobernante fue combatir la pobreza, reducir la desigualdad social y mejorar la distribución del ingreso: “primero los pobres” fue una de sus más exitosas consignas.
El cuarto año de la 4T va hacia su fin y la pobreza no solo sigue en pie, sino es más aguda que al inicio del sexenio; los ingresos de los más ricos aumentan desmesuradamente mientras los salarios de la clase trabajadora se reducen comparados con el aumento de las ganancias de los empresarios más ricos; aunque se aprueben aumentos al salario mínimo y se festejen como un gran logro, éstos son, en realidad, insignificantes.
Los estudios consultados y los expertos que opinan en el Reporte Especial de esta semana muestran una tendencia completamente opuesta a la que se esperaba de haberse cumplido las reiteradas promesas del primer mandatario, pues aumentaron aceleradamente la desigualdad y la pobreza.
La brecha entre los ingresos de ricos y pobres y su ensanchamiento es una ley económica del capitalismo; los ricos no pueden aumentar sus ganancias sin que los pobres disminuyan sus ingresos, haciéndose cada vez más pobres. Pero la ignorancia de esta ley no disculpa a quien prometió eliminar la pobreza, como no se disculpa al homicida de haber dado muerte a un semejante por ignorancia.
Las promesas de reducir la pobreza durante el sexenio “transformador” no se han cumplido; pero los ricos sí que han recibido protección para aumentar sus ganancias, que han crecido como nunca sin que haya una política fiscal que modere esta realidad. El mismo Presidente ha reconocido que su política benefició a los grandes empresarios y que “no hay un rico en México” que durante su sexenio “haya perdido dinero”.
La militarización en el país tiene raíces más profundas, que van más allá de las iniciativas y acciones del gobierno federal.
La 4T sigue inyectando dinero a un pozo sin fondo cuando ese recurso bien puede ser utilizado en beneficio de los mexicanos, ahora a los guerrerenses afectados por el huracán, dijo el legislador Julen Rementería.
Morelos, Zacatecas, Chiapas, Michoacán y Baja California son los cinco estados con las peores calificaciones en torno al nivel de confianza ciudadana.
“Un segundo aspecto es que el Presidente, con las decisiones que ha llevado a cabo su gobierno, ha abierto el espacio para que la corrupción pueda incrementarse", señaló Rivas.
Puebla vive tiempos violentos, no existe división de poderes, a los municipios les fue recortado los presupuestos.
Si Emilio Ulloa se alía con Zepeda, las probabilidades del primer municipio naranja son muy altas.
Denunció que fue expulsada de esa Comisión.
A la lista de accidentes se suma también los reportes por daños en el equipo ferroviario, la infraestructura o percances en la operación.
Las cosechas de algodón de la región, en Coahuila, han sido olvidadas; este año, los 3,500 campesinos de San Pedro de las Colonias disminuyeron su cultivo en más de 50% respecto al número de hectáreas destinadas en 2020.
Hay un abandono criminal de las carreteras mexicanas (el promedio diario de muertes por accidente es superior a 50), los culpables no son otros más que AMLO y sus pésimos colaboradores.
Antes de ser titular del ISSSTE, Bertha Alcalde fue una de las candidatas de López Obrador para ser ministra de la Suprema Corte de Justicia de la Nación.
Sheinbaum admitió que las reformas constitucionales que envió AMLO tiene prioridad.
En la historia de los procesos electorales en México no faltan casos de injerencia del Estado, del Presidente de la República y del partido en el gobierno; intervenciones ilegales y atropellos a la legislación electoral.
El presupuesto destinado a la actividad física es de 0.056% del gasto total del gobierno, algo insignificante, por ello todos los deportistas nobles de México deben exigir más presupuesto a su actividad, pues se trata de un derecho constitucional.
La 4T no tiene con qué fondear los carísimos e inútiles proyectos de infraestructura de AMLO ni los programas electoreros con las “tarjetas del bienestar”; para financiarlos está utilizando los ahorros y los activos de los mexicanos. Explico.
Escrito por Redacción