Hablar de política cultural en América Latina implica adentrarse en un terreno donde conviven aspiraciones legítimas, inercias históricas y una estampa institucional inestable y poco eficiente.
Cargando, por favor espere...
Es sabido que muchos de los personajes que viven del presupuesto público suelen conducirse sin mucha ética. La ética, según la Real Academia Española (RAE), es un conjunto de normas morales que rigen la conducta de una persona en cualquier ámbito de su vida y le permiten discernir entre el bien y el mal.
Entre los principios éticos más importantes destacan la justicia, la libertad, la honestidad, la responsabilidad y el respeto a otras personas. Estos valores son necesarios para la sana convivencia social y los gobernantes son los primeros obligados a preservarlos, defenderlos y exigir su cumplimiento a los ciudadanos. Pero esto, como veremos, no sucede en nuestro país respecto a la aplicación de estos principios. Antes y durante la pandemia, familiares de desaparecidos, secuestrados y asesinados han exigido justicia sin que nadie los atienda y solo han recibido baldes de agua fría en la cara, mientras los victimarios reciben el perdón porque las autoridades aplican la estrategia presidencial de “abrazos y no balazos”.
Con relación al principio ético de la libertad, la Presidencia de la República está torciendo a su conveniencia las leyes para silenciar las voces disidentes, ya sea con amenazas directas o mediante el uso no muy sutil de la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) dirigida por un enfermo mental que tiene órdenes de perseguir a todo aquel que pudiera ser un peligro para el gobierno de la “Cuarta Transformación” (4T). Y para contener el descontento social del pueblo, que está aumentando debido a la crisis económica en marcha, el gobierno tiene a la Guardia Nacional en las calles. De ahí que la palabra libertad en labios de la 4T suene tan lejana.
El gobierno de López Obrador (AMLO) ha actuado con enorme irresponsabilidad al desmantelar el sistema de salud y provocar su acelerada caída con la llegada del Covid-19, que está cobrando demasiadas vidas; al dejar de lado los proyectos de infraestructura productiva y básica; al reducir los presupuestos de educación, ciencia y tecnología y al debilitar la economía nacional con su negativa a apoyar a las empresas pequeñas y medianas, hoy a punto de extinguirse por la pandemia.
El Presidente no es una persona honesta; miente de manera deliberada y solamente le importa ganar las elecciones de 2021; por ello aun en plena contingencia sanitaria, salió a realizar sus giras en los estados. Ha mentido un silencio criminal respecto a las cifras del coronavirus e incita a la población a no cuidarse. La ciencia y el sentido común no forman parte de su verborrea, prefiere sus chistecitos y mentiras aunque cobren vidas; además, con su forma de conducirse, le falta el respeto a los mexicanos. En lugar de oír, analizar y resolver, sus únicas respuestas son los ataques contra quienes no comulgan con sus ideas, contra quienes se atreven a señalar sus fallas y contra quienes solo esperan ser escuchados. Criminaliza a todos ellos y se mofa utilizando epítetos despectivos; les dice abiertamente que le hagan como quieran, cerrando así los canales legalmente establecidos para conciliar intereses y resolver los problemas.
Con esta actitud, AMLO violenta la Constitución y debilita el Estado de Derecho. Sus traspiés y dislates son tantos y cotidianos, que su comportamiento empieza a resultar patológico a tal grado, que algunos psicoanalistas deben estar realizando ya su diagnóstico psiquiátrico. Entre los muchos elementos que deben estar analizando se halla su reciente “decálogo para enfrentar la pandemia y salir a la nueva normalidad”, que representa un regalo de su criminal y monumental ineptitud. No tiene mucho sentido comentar sus 10 puntos; varios analistas han ensalzado o criticado ya lo suficiente su contenido, carente de valor alguno; solo puedo agregar que se trata de un listado de frases vacías y atropelladas con el que ni siquiera un párvulo de primaria cumpliría a satisfacción su tarea escolar.
Sin embargo, este libelo queda como constancia escrita de la baja capacidad intelectual del Presidente de México; de la forma absurda, como está conduciéndose ante la trágica situación que vive el país, y su único valor relativo consiste en explicar por qué el pueblo mexicano no puede esperar de AMLO respuestas concretas para salir de las crisis económica y sanitaria que hoy lo agobian.
Un farsante sabe que tarde o temprano la verdad sale a la luz, pues el Sol no se puede tapar con un dedo. Si el pueblo se equivocó en 2018, ese mismo pueblo bueno y sabio será el que, por vía del voto directo, lo haga morder el polvo.
Hablar de política cultural en América Latina implica adentrarse en un terreno donde conviven aspiraciones legítimas, inercias históricas y una estampa institucional inestable y poco eficiente.
Los gobernadores de Morena tienen la instrucción de financiar y organizar el traslado de simpatizantes hacia la capital mexicana.
En octubre y noviembre, las protestas y manifestaciones en la Ciudad de México (CDMX), los estados vecinos y en todo el país se han convertido en el pan de cada día.
También tendrán un nuevo beneficio: un seguro de vida institucional valuado en alrededor de 60 mil pesos.
Las manifestaciones de los agricultores que denuncian el abandono del campo por parte del gobierno de la 4T y piden que se fije un precio de garantía de 7.5 pesos por kilogramo de maíz en grano coparon las noticias hace unos días.
Casi el 40% de la población gana el salario mínimo de ocho mil 500 pesos mensuales.
La reasignación de recursos reaviva la tensión entre el Ejecutivo y los órganos autónomos
La ley contempla 34 agravantes, incluyendo la extorsión cometida con violencia.
Legisladores morenistas protestan por volver a sesiones presenciales; Monreal los pone en orden: quien no asista, cobrará menos.
La jefa del ejecutivo señaló que en las próximas semanas darán continuidad a las negociaciones.
Al momento de la votación, Blanco pidió que se registrara su asistencia.
Buscan compartir estrategias que brinden mayor seguridad en las comunidades.
Así como con otros homenajes otorgados internacionalmente, el Nobel de la Paz no es un premio que goce de neutralidad.
Claudia Sheinbaum impulsó la candidatura Chema Tapia en 2024; hoy se deslinda de él tras reaparecer señalamientos por su gestión en el Fonden.
Busca fortalecer la prevención y el acompañamiento a víctimas más allá de los procesos electorales.
Preparan movilización en CDMX en apoyo a Venezuela
“Ley Esposa”: buscan postular a mujeres en gubernaturas de San Luis Potosí y Nuevo León
Ayuntamiento de Ixtapaluca ocultó estado de salud del alcalde Felipe Arvizu
Rusia llama a EE. UU. a evitar un “error fatal” en escalada de tensiones por Venezuela
Energía renovable avanza, pero con menor inversión de la esperada
Costo de la deuda de Pemex alcanza su mayor nivel desde 2015
Escrito por Capitán Nemo
COLUMNISTA