Que el país más poblado de la Tierra haya logrado en 40 años el destino del desarrollo, evidencia no solo que hay otros caminos para lograrlo, sino debería cuestionarnos si efectivamente la arquitectura global para el desarrollo es acertada e imparcial.

Entre las distintas civilizaciones, creencias y costumbres, ¿es mejor encerrarse en sí mismo o abrazar la apertura y la inclusión? China responde: tender puentes de intercambio y aprendizaje mutuo para hacer de la Franja y la Ruta un camino de civilización.

Las Dos Sesiones han demostrado plenamente la ley de oro del desarrollo de China. Con las cinco ­­le­tras de la palabra China, quisiera analizar las cinco señales transmitidas:

Hong Kong le ha demostrado al mundo que para que una sociedad capitalista se desarrolle a niveles nunca antes vistos, no se necesita ni de Gran Bretaña ni de EE. UU., ni del imperialismo como lo conocemos hoy.

La visita de Nancy Pelosi a Taiwán demostró que “la parte estadounidense deliberadamente distorsiona, oscurece y vacía el principio de una sola China”.

Entre los seis huevos, uno se encontró completamente intacto, con una longitud de poco más de 2.5 centímetros.

Mientras China es un ejemplo de progreso y desarrollo para los países, Rusia agradeció las muestras de apoyo y solidaridad de México hacia su país. Además destacó que Rusia no inició la guerra, sino que la está terminando.

Mientras el capitalismo exista la batalla se tiene que dar en su terreno y, como vemos, son las naciones con “tendencia” socialista, las que honrosa y decididamente libran esta batalla a favor de los intereses de la humanidad entera.

El prototipo de futuro verde tiene en Xiamen un vigoroso ejemplo que combina aprovechamiento económico de los recursos e infraestructura para la población sin menoscabo del medio ambiente.

Sin autorización del gobierno chino, Washington inició una operación en el mar de China para “defender los derechos y libertades de navegación". Ante ello, el gigante asiático acusó a EEUU de ser un destructor de la paz y estabilidad regionales.

El Covid-19 nos abre los ojos sobre lo que nos falta, pero también nos alumbra el camino para conseguirlo; para poner la humanidad a salvo de ésta y de todas las plagas que puedan venir en el futuro. 

Oceanía es objeto de una implacable apetencia económica y política de EE. UU., a la que China se opone para evitar que las islas-Estado geoestratégicas se alineen por completo al líder del imperialismo occidental.

Entrelazados a lo largo de una historia centenaria, el Tíbet y China comparten un único destino.

China tiene la intención de contrarrestar cualquier intento de interferencia extranjera en el asunto de Taiwán y defender su integridad territorial, sostuvo el portavoz de la Cancillería china, Zhao Lijian, en una rueda de prensa.

El principal motivo por el que E.U. está acondicionando y difundiendo el discurso sobre una nueva Guerra Fría, es que siente amenazada su hegemonía mundial por el avance económico y tecnológico de China.