Cargando, por favor espere...
La obra literaria de Gustave Flaubert no ha sido olvidada y los textos más emblemáticos de este autor francés están a la mano de los lectores actuales en ediciones recientes. Por ello es importante que tratemos de analizar la relevancia y actualidad de su literatura.
Son tres los textos más importantes de Flaubert: Madame Bovary, Salambó y La educación sentimental. Salambó fue el que le dio, según el propio artista, mayor fama, mientras que La educación sentimental no fue bien recibida por el público y solo hasta después de su muerte pudo verse la originalidad de su tema.
Las tres novelas, con historias distintas, reflejan objetivamente las condiciones sociales, las preocupaciones, las formas de vida y las concepciones del mundo de los personajes con sus respectivos entornos históricos. Salambó es una novela histórica que relata los tiempos de Amílcar Barca en Cartago. La historia se ubica al término de la Primera Guerra Púnica, cuando los mercenarios que utilizaba Amílcar se rebelaron en demanda del pago a sus servicios y decidieron hacer la guerra a los cartagineses para cobrarse por mano propia lo que les debían.
No son las hazañas de un héroe lo que le interesa relatar a Flaubert. Amílcar no es intachable, es simplemente una persona histórica, es decir, determinada por su sociedad, por sus propios intereses y los intereses de su clase. Salambó, antes que el relato de la vida de Amílcar, o de Salambó: su hija (personaje inventado por Flaubert), es el relato de las crueldades de la guerra y dentro de ésta nadie está exento de culpas. El relato se teje con traiciones, alianzas, batallas y falacias retóricas que contraponen a unos contra otros y que nada tienen que ver con los honores de la épica.
Amílcar, a quién menos podemos criticar, según la moral contemporánea, sacrifica a un niño esclavo con tal de no entregar a su hijo Aníbal a los sacerdotes para aplacar a los dioses que, según ellos, exigían el sacrificio de sangre joven para acabar con los dolores de la guerra. De esta manera se muestran las formas crueles de un proceso que, aunque toma apariencias individuales, representa los intereses de distintas clases sociales que juegan su fortuna dentro de las condiciones históricas en las que les tocó actuar.
En La educación sentimental el contexto es muy distinto, pero el propósito es idéntico: exponer la complejidad de la vida en un conflicto que cimbra las bases de la sociedad. En este caso, el conflicto es la Revolución de 1848 en Francia, de cuyos hombres Flaubert retrata con claridad y crudeza costumbres y veleidades de la época. Pretende ser una novela realista, razón por la que en su tiempo no fue apreciada y porque su propuesta literaria se salía de los cánones de la literatura de ese momento.
Dentro de este contexto podemos decir que Flaubert inauguró prácticamente toda una corriente en la literatura francesa, pues grandes literatos como Émile Zola y Guy de Maupassant se inspiraron en esta novela para hallar la forma con la que deseaban retratar la realidad francesa de su tiempo, creando así el naturalismo. La realidad y la sinceridad con la que habla Flaubert, y la forma en que describe los pequeños y grandes problemas, son algunos de los rasgos literarios de Flaubert que más dicen y disfrutan los lectores de hoy.
Escrito por Alan Luna
Maestro en Filosofía por la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM).