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El periodista Mike Billington de la Executive Intelligence Review del Instituto Schiller entrevistó al coronel y senador norteamericano Richard Black. Esta entrevista pasaría por ser una más que los miembros de la élite política y militar de Estados Unidos (EE. UU.) otorgan a un medio de difusión, si no es porque las opiniones vertidas por el senador son completamente contrarias a las ideas y la política del gobierno norteamericano y la totalidad de los grandes corporativos de la comunicación que existen en EE. UU. y el mundo Occidental. Bien vale la pena por esta ocasión dejar de reseñar alguna cinta de ficción o documental para reseñar esta entrevista, dado que nos muestra cómo no todos los integrantes de la “clase” política gringa justifican las atrocidades del imperio yanqui y la necesidad de que EE. UU. sea el país que ejerza el control unipolar del mundo. Expongo pues las opiniones del senador norteamericano Richard Black:
En primer lugar, en este video que se encuentra en YouTube, Billington hace una presentación del senador por Virginia hasta el año 2020. Billington le pide en primer lugar su opinión a Black sobre la guerra que han desatado EE. UU., Gran Bretaña y la OTAN en contra de Rusia, utilizando a Ucrania en el frente de batalla, así como la guerra económica de Occidente contra Rusia (Billington, abundando en su cuestionamiento al senador, señala que a Rusia se le ha acusado de cometer crímenes de guerra, siguiendo con sus métodos aplicados en la guerra en Siria y pregunta concretamente: ¿cómo se involucró Rusia en la guerra de Siria?), lo primero que responde Black es: “yo soy un patriota que me alisté voluntariamente en el ejército norteamericano para combatir en Vietnam; participé en la campaña más sangrienta de esa guerra y fui piloto de un helicóptero que voló en 269 misiones de combate; en misiones de combate participé en infantería y fui herido varias veces; soy muy pro Estados Unidos y formé parte de la OTAN… cuando existía la Unión Soviética estaba yo dispuesto a morir en una guerra contra esa nación, pero ahora Rusia no es ya la Unión Soviética en absoluto. Rusia no es un Estado comunista, eso no le queda claro a la gente porque los medios de comunicación han distorsionado la imagen de Rusia”.
Black deja muy claro que Rusia fue muy reacia a involucrarse en la guerra de Siria (de 2012 a 2016 se dio una batalla en la ciudad de Alepo que se considera, por su ferocidad, el “Stalingrado de Siria”. “La guerra –señala Black– comenzó cuando Estados Unidos desembarcó sus agentes de la Central de Inteligencia Americana (CIA) en Siria para coordinar a Al Qaeda y a otros grupos terroristas. A estos grupos los surtimos con todas las armas antiaéreas y antitanques; los de Al Qaeda siempre han sido nuestros títeres en el terreno. EE. UU. siempre ha tenido una forma estratégica de utilizar a otros, así como lo ha hecho en Siria utilizando a Al Qaeda y al Estado Islámico (ISIS). En Siria, el objetivo de EE. UU. era derrocar al gobierno legítimamente electo utilizando a los terroristas más viles (algo parecido está pasando en Ucrania); en Siria participaron Hezbollah y algunas fuerzas mandadas por Irán; pero los que realmente libraron la batalla fueron los soldados sirios; Rusia solo intervino cuatro años después de iniciada la guerra; su participación se redujo al último año de guerra y solo participó como una fuerza aérea muy efectiva; no hubo participación de fuerzas terrestres. Por eso, acusar a Rusia de la destrucción masiva de Alepo es una gran mentira, pues la destrucción había ya ocurrido antes de la entrada de Rusia al conflicto. La narrativa de Occidente pretende demonizar a Rusia. Rusia no fue, de ninguna manera, la responsable de la destrucción de Alepo”.
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Escrito por Cousteau
COLUMNISTA