Con 208 votos a favor y ninguno en contra, este nueve de enero el Parlamento de Corea del Sur aprobó una ley que prohíbe la producción y venta de carne de perro, misma que entrará en vigor en 2027. Lo anterior ha generado inconformidad entre los criaderos de perros, quienes advirtieron que desafiarán la norma y convocarán a protestas.

El gobernante Partido del Poder Popular (PPP) y el principal partido de la oposición, el Partido Demócrata (PD) han sacado adelante esta medida de forma conjunta a medida que la sociedad se va concientizando sobre los derechos de los animales y el respeto al medio ambientales.

La prohibición del consumo de esta carne era una de las principiarles promesas de campaña del presidente surcoreano, Yoon Suk Yeol, quien afirmó, respeta el veto de la Asamblea Nacional. “Esta ley está pensada para contribuir a hacer realidad los valores de los derechos de los animales, persigue el respeto a la vida y la coexistencia armoniosa entre humanos y animales”, se lee en la norma.

Según las estadísticas del Gobierno, en Corea del Sur hay unas 1,150 granjas de perros, 34 empresas de carnicería, 219 distribuidores y aproximadamente 1,600 restaurantes que venden comida hecha con carne de perro, la cual no sólo es consumida por los coreanos, sino también por otros países asiáticos como China, India, Vietnam, Filipinas, Camboya e Indonesia.

Aquellos que infrinjan la ley podrán enfrentarse a penas de hasta dos años de prisión o multas de unos 30 millones de wones (unos 20,000 euros).

Se estima que alrededor de 30 millones de perros son sacrificados cada año en Asia.