Un día después de la balacera ocurrida en el Deportivo “Medina Ventura”, en el pueblo de San Juan Ixtayoapan, en la alcaldía Tláhuac, donde murieron dos personas y ocho más resultaron heridos, las canchas de futbol lucen abandonas y sin gente ejercitándose luego de cerrarse por tiempo indefinido.

Los vecinos no quieren decir nada, “nadie sabe nada, nadie vio nada… hay miedo y sabemos que las represalias no tardarán en llegar”, comentan habitantes de ese pueblo, donde ya antes se han registrado hechos lamentables como el linchamiento de tres agentes federales que investigaban para localizar redes de narcomenudeo.

Este martes los vecinos refieren que el pasado domingo se llevaba a cabo la final de una liga de barrio; en el lugar había unas 80 personas cuando hombres armados llegaron en motocicleta y mataron a los dos que buscaban, los demás, aseguran, fueron víctimas inocentes.

Hoy no llegan por ti así nada más. Eran narcos la gente de aquí los conoce, andaban muy tranquilos por todos lados, como si nada, con total impunidad y, mira estas son las consecuencias, nos quedamos sin fútbol, lamentan los vecinos.

También denunciaron que la delincuencia organizada poco a poco se fue metiendo hasta en los juegos de barrio. Recordaron que antes lo que más sucedía eran unos golpes entre los equipos, pero que no pasaba a mayores. Sin embargo, de unos años para acá la situación cambió.

En tanto, la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México ya investiga el doble homicidio y agentes establecieron que se trató de un ataque directo contra la familia de Gastón Montealegre Medina, mejor conocido como El Gastón, líder de los Gastones, quienes se disputan el trasiego de drogas con el cártel de Tláhuac y a la familia Michoacana.