A nivel mundial, México se ha convertido en el máximo productor y exportador de aguacate, cuatro de cada cinco piezas que se consumen en Estados Unidos (EE. UU.) provienen de este país; las exportaciones superan los tres mil millones de dólares anuales; todo ello a costa de la deforestación, el robo de agua y violencia en las entidades de Jalisco y Michoacán, informó la organización Climate Rights International.

En el reporte titulado “El saldo insostenible de la expansión aguacatera: Deforestación, acaparamiento de agua y violencia detrás de las exportaciones de México a Estados Unidos y otros mercados”, la organización analizó más de 50 mil huertas de aguacate certificadas para la exportación a EE. UU. e identificó aquellas que contenían tierras deforestadas en 49 de 56 municipios de Michoacán y Jalisco.

Además, el documento que está conformado por 250 páginas y un video, advierte las amenazas, ataques e incluso homicidios de los que han sido víctimas líderes indígenas y residentes en su intento por defender sus bosques y agua; también ofrece evidencias que vinculan a grandes importadores y supermercados estadounidenses con la destrucción ambiental en las huertas.

Al respecto, el director ejecutivo de la organización, Brad Adams, comentó: “cualquier aguacate que proceda de México puede haber sido cultivado en terrenos deforestados ilegalmente, usando agua robada, en una región donde se registran hechos de violencia e intimidación contra defensores ambientales”.

Lo anterior no debería ser así “si los exportadores, los importadores y los supermercados tomaran medidas para asegurarse de vender únicamente aguacates libres de deforestación, se reduciría de manera drástica el incentivo económico para despejar los bosques o atacar a las personas que los defienden”, manifestó.

Cabe destacar que los aguacates mexicanos están ganando terreno en mercados internacionales, según el organismo internacional, en los últimos cinco años, las exportaciones a Europa, Canadá y Asia sumaron más de dos mil millones.