En su intervención durante la sesión plenaria del Consejo Popular Mundial Ruso, el Presidente ruso, Vladímir Putin, puntualizó varios aspectos importantes al pueblo ruso, entre ellos, la lucha constante por la libertad no sólo de Rusia, sino de todo el mundo. “Estamos diciendo abiertamente que la dictadura de un hegemón –lo vemos, todo el mundo lo ve ahora– se está volviendo decrépita. Se ha hecho, como se dice, pedazos y es sencillamente peligrosa para los demás”, sentenció.
El mandatario ruso dijo que Rusia es la nación que ahora está a la vanguardia de la formación de un orden mundial más justo; que no es posible un orden mundial duradero y estable sin una Rusia soberana y fuerte.
Sobre la llamada “rusofobia” y otras formas de racismo y neonazismo, sostuvo que se han convertido prácticamente en la ideología oficial de las élites gobernantes occidentales.
“Occidente no necesita un país tan grande y multinacional como Rusia. La diversidad y unidad de culturas, tradiciones, lenguas y etnias que tiene nuestro país simplemente no encaja en la lógica de los racistas y colonizadores occidentales y en su cruel esquema de despersonalización total, desunión, supresión y explotación”, aseguró el presidente Vladimir Putin.
También afirmó que gracias a la unión del Estado y las empresas, frustraron la agresión económica sin precedentes de Occidente. “Su blitzkrieg de sanciones ha fracasado”.
“Consideramos cualquier interferencia externa o provocación con el objetivo de generar un conflicto interétnico o interconfesional como acciones agresivas contra nuestro país. Reaccionaremos en consecuencia”, comentó.