Durante el Gobierno Federal se han conformado 20 grupos criminales que operan en 14 entidades de la República: nueve son cárteles del narcotráfico, ocho células criminales ligados a narcotraficantes y tres grupos delictivos más que se enfocan en el robo de hidrocarburos.
Entre las asociaciones delictivas que se han conformado en el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador están el Cártel de Caborca, en Sonora; la Unión de León en Guanajuato; Independiente de Colima y Pueblos Unidos en Michoacán.
Además de La Séptima Sección en Oaxaca; el de San Juan Chamula en Chiapas; Nuevo Imperio en alcaldías de la Ciudad de México y en municipios circunvecinos del Estado de México; el de San Luis Potosí Nueva Generación y Los Alemanes, ambos en la entidad potosina, de acuerdo con los reportes de las Secretarías de Marina (Semar), Defensa Nacional (Sedena), Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC), Guardia Nacional (GN), Centro Nacional de Inteligencia (CNI) y Fiscalía General de la República (FGR).
Cabe destacar que el Cártel de San Luis Potosí, Nueva Generación, mantiene presencia desde el 2020 en comunidades de San Vicente Tancuayalab, Tanquian de Escobedo y Tamuín, por mencionar algunas. El de Nuevo Imperio opera desde el año 2021 y el Independiente de Colima o Cártel de los Mini K surgió en este 2023 tras romper con el Cártel de Sinaloa.
Con respecto a los grupos dedicados al robo de hidrocarburos, las autoridades de seguridad destacan la presencia de Los Cenobios, que desde 2021 operan en el municipio de Cuautepec, Hidalgo; además de Los Borregos que desde el 2019 están ligados a la sustracción ilegal de gas LP en el Edomex, a través del ducto Cactus-Guadalajara.
Los brazos armados de grandes cárteles que se conformaron en esta administración son: Los Pelavacas, Los Pelones 33, Los Deltas afines a diversas fracciones del Cártel de Sinaloa y Los Zorros del Cártel de Jalisco Nueva Generación, por mencionar algunos.