Pese al compromiso de la gobernadora de Guerrero, Evelyn Salgado, con la ciudadanía para vender la tortilla en 20 pesos al firmar de un acuerdo con autoridades en el tema, muchos comerciantes se han negado a acatar la disposición y venden el kilogramo hasta en 50 pesos.
El acuerdo se había tomado para apoyar a las familias damnificadas de algunas colonias de Acapulco, que recibieron el impacto del huracán Otis. Es importante mencionar que la bajada de precios no depende de una simple firma y voluntad, sino del costo de producción de la tortilla.
De acuerdo con vecinos de la colonia Renacimiento, en las tres tortillerías de la colonia, el kilo se vende en 40 pesos, pero entienden, ya que afirman, “sus costos de operación siguen siendo altos porque a ellos no les han bajado ni el precio del maíz como tampoco del gas y mucho menos la luz”.
Esto mismo ocurre en las colonias Ampliación Vacacional, Paso Limonera, Lomas de Costa Azul, Praderas, Icacos, Puerto Marqués, Colosio, Viveristas y Cumbre de Figueroa, donde el costo de la tortilla ronda los 30 y 50 pesos.
En las únicas zonas donde el kilo permanece en 20 pesos, que son las del centro, las tortillerías condicionan a la gente a adquirir únicamente dos kilos por familia, para evitar la reventa del producto de manera clandestina.