A unos días de que se celebre el Día de Muertos, la Alianza Nacional de Pequeños Comerciantes (ANPEC) estimó que "el fantasma de la inflación" rondará esta celebración debido al encarecimiento de las flores, veladoras, fruta, pan de muerto, adornos y todo lo que implica la colocación de una ofrenda.

Con base en un estudio de mercado, el organismo estimó que las familias mexicanas gastarán más allá de los mil 500 pesos.

Cuauhtémoc Rivera, presidente de la ANPEC, destacó que ante los precios tan elevados, será difícil que las familias puedan adquirir los productos.

Cada familia gastará en promedio por celebración entre los mil 100 y mil 500 pesos, en las que deberán adquirir los alimentos y platillos que cuestan hasta 400 pesos; adornos que rondan los 300 pesos; flores, los mismo, 300 pesos; y veladoras, 150 pesos; sin contar los traslados en los que las familias gastarían hasta 250 pesos.

Dichos incrementos, respecto al año pasado, señaló Rivera, hace más difícil que las familias coloquen una ofrenda como les gustaría, es decir, que contengan todos los alimentos que a sus difuntos les gustaban en vida.

“Los gastos totales, con motivo de la celebración con motivo del Día de Muertos, presentan una variación de precios de precios general de 30.08 por ciento al alza, es decir, los precios se encarecieron con respecto al 2022, esto incluye la visita al panteón, poner un altar de muertos y el tema del consumo del pan de muerto, todos estos que tienen que ver con la celebración se han encarecido 30.08”.