Gabriela Salido Magos, presidenta de la Mesa Directiva del Congreso de la Ciudad de México, condenó enérgicamente este jueves la agresión que sufrió el diputado Miguel Ángel Macedo Escartín, y lamentó las condiciones en las que ocurrió este incidente al exterior de ese órgano legislativo.
Desde la máxima tribuna del poder legislativo, precisó que este tipo de acciones no se pueden repetir. Lo anterior, tras las protestas que este jueves se desarrollaron en las afueras del recinto de Donceles y Allende donde victimas acompañados de sus familiares exigieron a Ernestina Godoy Ramos “acelerar” el proceso de sus denuncias, debido a que existen carpetas con más de cuatro años sin ser revisadas.
En medio de las protestas se suscitaron algunos roces, como gritos y empujones, por ejemplo, al legislador Macedo Escartín. Otro momento se presentó cuando el también morenista Carlos Hernández Mirón intentó ingresar al recinto, pero con gritos y consignas no se le permitió acceder al Congreso local, por lo que tuvo que retirarse junto con varios de sus compañeros.
“El diálogo es una de las principales actividades que se deben desarrollar en un parlamento, no podemos ni debemos poner barreras a la pluralidad; las facultades que la Ley Orgánica y el Reglamento de este Congreso le confiere a la presidencia de la Mesa Directiva, se han ejercido de forma imparcial, dijo Gabriela Salida Magos.
Insistió en que el Congreso local es una instancia en la que tienen cabida todas las voces y que la presidencia de la Mesa Directiva nunca utilizará el uso de la fuerza para silenciarlas.
“Desde esta presidencia, quiero dejar constancia que no se escatiman esfuerzos por atender y escuchar las demandas ciudadanas, por supuesto, tomando las decisiones y las medidas institucionales que permitan organizar el trabajo para las sesiones del Pleno de este Congreso, por lo que la conducción y actual presidencia está apegado a la institucionalidad, diligencia y sobre todo apertura al dialogo”, recalcó.