Moscú acusó a Washington de no haber detenido en ningún momento el envío de armamento a Kiev, pese a las declaraciones públicas sobre los costos y el reparto de gastos con Europa. “El hecho es que los suministros de armas, municiones y equipo militar de EE. UU. a Ucrania continuaron y continúan”, declaró este lunes 14 de julio Dmitri Peskov, portavoz del Kremlin.

La crítica se produjo luego de que el presidente de Estados Unidos (EE. UU.), Donald Trump confirmara el envío de misiles Patriot, financiados por la Unión Europea.

Peskov también señaló que Rusia permanece dispuesta a sostener una tercera ronda de negociaciones con Ucrania, aunque criticó la aparente falta de interés del gobierno de Volodímir Zelenski. “Es evidente que Kiev no tiene prisa”, ironizó.

Además, el Kremlin denunció un aumento de tensiones en el Báltico, atribuido a lo que calificó como “acciones provocadoras” de países europeos. “Rusia tiene la intención de proteger firmemente sus intereses legítimos en esta región”, afirmó el vocero.

EE. UU. fija plazo de 50 días para alcanzar la paz

Pese a la contradicción de suministrar armamento, el presidente estadounidense, Donald Trump, advirtió este 14 de julio que impondrá aranceles “muy severos” contra Rusia si no se logra un acuerdo de paz en Ucrania dentro de los próximos 50 días.

Además, anunció aranceles secundarios del 100 por ciento contra países que importan petróleo ruso. Según Trump, no necesita la aprobación del Congreso para aplicar esas sanciones.

Durante su encuentro con el secretario general de la OTAN, Mark Rutte, Trump informó que ya se alcanzó el acuerdo de que la UE cubrirá los costos del armamento que EE. UU. enviará a Ucrania.  El paquete incluirá 17 baterías de misiles Patriot, el triple de lo que posee actualmente Alemania.

Asimismo, varios países europeos transferirán sus sistemas a Kiev y recibirán nuevas unidades estadounidenses a cambio. “Esta es una oportunidad para que Ucrania pacte la paz”, sostuvo el mandatario.