Este jueves 19 de junio comenzaron los foros para la implementación de la Jornada Laboral de 40 horas semanales. A las afueras del Museo de la Ciudad de México, en el Centro de la Ciudad, diversos colectivos y organizaciones civiles se manifestaron en contra de la propuesta del Gobierno de la presidenta Claudia Sheinbaum, que contempla una implementación gradual de la reforma.

Minutos antes de las 10:00 horas, el Frente Nacional por las 40 Horas organizó un mitin para exigir la reducción de la jornada laboral a 40 horas semanales, sin recortar salarios ni prestaciones. Los inconformes demandan la reducción inmediata de las ocho horas sin afectar la remuneración ni los beneficios para los trabajadores.

El Frente también rechaza la propuesta del gobierno de implementar la reducción de manera gradual hasta 2030, considerándola una estrategia dilatoria. Argumentan que el Estado tiene una deuda histórica con la clase trabajadora, ya que durante más de 100 años no ha habido cambios en las horas laborales, especialmente con las mujeres, quienes soportan una doble carga: el trabajo remunerado y el de cuidados, este último aún sin reconocimiento.

Los manifestantes también mencionaron que los avances en materia laboral, tales como la "primavera laboral", el outsourcing, el programa "Joven Construyendo el Futuro" y los índices de empleo y desempleo, son logros superficiales, pues una tercera parte de la población gana solo el salario mínimo y se encuentra en el sector informal. Según los trabajadores, este panorama contrasta con la concentración de riqueza en pocas manos.

Por su parte, sectores empresariales advierten que una reducción abrupta de la jornada laboral incrementaría los costos laborales y afectaría la competitividad de las empresas.