En 2024, México recibió 64.7 mil millones de dólares por concepto de remesas, cantidad que representó el 3.5 por ciento del Producto Interno Bruto. Ante la medida del gobierno de Estados Unidos (EE. UU.) de imponer un gravamen a estos envíos, la Cámara de Diputados presentó este viernes 13 de junio una iniciativa para proteger a los migrantes y a sus familias.

La diputada federal Fuensanta Guerrero, del Partido Revolucionario Institucional (PRI), propuso que la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV) coordine una estrategia con el objetivo de reducir el impacto del nuevo impuesto.

El planteamiento contempla tres acciones principales: reducir las comisiones que cobran los bancos por el envío de remesas, abrir más canales formales para realizar los envíos y establecer reglas claras para evitar abusos por parte de las instituciones financieras.

Guerrero sostuvo que este tipo de medidas resulta urgente, ya que millones de familias dependen de esos recursos para cubrir necesidades básicas. También pidió realizar un análisis detallado sobre las consecuencias del nuevo gravamen en la economía nacional y en los hogares que viven del dinero que envían sus familiares desde el extranjero.