Los Ángeles, Nueva York, San Francisco, Las Vegas, Seattle, Austin, Chicago y Atlanta, son sólo algunas de las 24 ciudades que se sumaron a las protestas contra la política migratoria instrumentada por el presidente de Estados Unidos (EE. UU.), Donald Trump.

El pasado viernes 6 de junio, las movilizaciones comenzaron y se han mantenido durante seis días en Los Ángeles; sin embargo, se han extendido en 24 ciudades, donde miles de personas han tomado las calles en respuesta a las redadas federales y a los operativos de detención y deportación masiva promovidos por el Gobierno.

Debido a las movilizaciones, la ciudad de Los Ángeles se encuentra bajo toque de queda y con fuerte presencia militar; hasta el momento han sido detenidas 330 personas; mientras que en San Francisco la cifra alcanza al menos 240 arrestos luego del cierre de dos tribunales de inmigración.

En Nueva York, la protesta escaló con enfrentamientos entre policías y activistas, algunos de los cuales fueron arrojados al suelo y rociados con gas pimienta; situación que se repitió en Atlanta, donde los uniformados intentaron dispersar a los manifestantes con el uso de químicos. En Chicago, la marcha culminó con incidentes entre la policía y manifestantes que lanzaron botellas de agua.