De acuerdo con Rodrigo Mariscal Paredes, jefe de la Unidad de Planeación Económica de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), los hogares mexicanos tienen los ahorros suficientes para afrontar una recesión. No obstante, los indicadores macroeconómicos revelan lo contrario.
Durante su participación en un evento organizado por el Council of the Americas, Mariscal Paredes afirmó que “los ahorros de la población mexicana han venido creciendo y ya estamos por arriba de la tendencia que teníamos antes. Es decir, incluso si hubiera una recesión, los hogares mexicanos tienen ahorita ahorros suficientes y su hoja de balance está bastante fuerte para poder afrontar una situación de recesión”.
En este sentido, explicó que el incremento de los recursos ahorrados se debe, en gran medida, a los aumentos salariales observados durante los últimos años, acompañados por la solidez en el mercado laboral.
Sin embargo, si se consideran los últimos indicadores sobre inclusión financiera y percepción económica, el panorama para los mexicanos dista de las estimaciones optimistas de la SHCP.
Según la última Encuesta Nacional de Inclusión Financiera (ENIF), elaborada por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), al cierre de 2024, 63 de cada 100 mexicanos tenían acceso a una cuenta de ahorro. No obstante, el estudio mostró que aún existe una gran parte de la población en situación de vulnerabilidad financiera.
De acuerdo con los datos de la ENIF, un 30 por ciento de la población podría experimentar inestabilidad financiera en su hogar, sobreendeudamiento, fragilidad ante choques económicos, incapacidad para aprovechar oportunidades económicas o dificultades para realizar pagos a tiempo.
“Uno de los conceptos básicos es la capacidad de cubrir gastos con ahorros. En México, 30 por ciento de la población no cuenta con ahorros o éstos serían insuficientes para cubrir más de una semana de sus gastos en caso de dejar de recibir ingresos. Alrededor de 20 por ciento tendría suficientes recursos ahorrados para cubrir entre una semana y un mes de gastos. Esta vulnerabilidad es preocupante, ya que cerca de la mitad de las personas desocupadas tardan más de un mes en conseguir un nuevo empleo”, indicó la ENIF.
Asimismo, el Indicador de Confianza del Consumidor (ICC), también presentado por el Inegi, reveló que en abril pasado la percepción de los consumidores mexicanos en cuanto a sus posibilidades de ahorro actuales avanzó tan solo 0.6 por ciento mensual, mientras que en comparación anual cayó 1.1 por ciento.
El ICC también mostró que las posibilidades de ahorro de los mexicanos en los siguientes 12 meses crecieron apenas 0.2 por ciento mensual, y disminuyeron 1.4 puntos porcentuales en comparación con el mismo periodo del año previo.
Por otra parte, los niveles de empleo también han ido a la baja, toda vez que, de acuerdo con los datos del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), durante abril pasado —fecha hasta la que se tiene registro— se perdieron 47,442 puestos de trabajo. Esta cifra solo ha sido observada en años de crisis como 2020 y 2009.