En una entrevista a la cadena de televisión TF1, el presidente francés, Emmanuel Macron, afirmó que los ucranianos entienden que su país no podrá recuperar los territorios que decidieron unirse nuevamente a Rusia, entre ellos Donetsk, Lugansk, Jersón y Zaporiyia. 

Las declaraciones se dieron la víspera del reinicio de la mesa de negociaciones entre Rusia y Ucrania en Estambul, Turquía. 

El mandatario francés declaró: "La guerra debe terminar y Ucrania debe estar en la mejor posición posible para entablar negociaciones", lo que "le permitirá tratar las cuestiones territoriales". 

Aunado a ello, Macron aseguró que Francia ya no puede mandar más armamento a Ucrania pues también tiene que pensar en su propia seguridad. “Hemos hecho todo lo posible", pero ya "no puede privarse de lo que es necesario para su propia seguridad". 

A decir del presidente francés, los países de la Alianza Atlántica "no pueden abandonar a Ucrania debido a que no se incorporará a la OTAN", y sostuvo que una vez firmada la paz "se planteará la cuestión de un mandato de la ONU o de la presencia de fuerzas de reaseguro" en Ucrania, para evitar un nuevo conflicto.

Los territorios que perdió Ucrania 

En 2022, a través de referendos, las poblaciones del Donetsk y Lugansk, en el este, y Jersón y Zaporiyia, en el sur de Ucrania, decidieron separarse de esa nación y reunificarse con Rusia, territorio con el que guardan una estrecha relación histórica, cultura e incluso religiosa. 

Las cuatro localidades representan casi 15 por ciento del territorio de Ucrania. Pero no fue la primera acción de este tipo. Desde 2014, la población de Crimea, península en el Mar Negro, también había tomado la decisión de reunificarse con Rusia. 

Actualmente, el litigio sobre el puerto de Odesa mantiene las negociaciones en suspenso, pues la prensa Occidental también ha asegurado que Rusia planea declarar este territorio como suyo.