Luego de seis meses de búsqueda, los cuerpos de Sandra Estefana Domínguez Martínez, activista oaxaqueña, y de su esposo Alexander Hernández Hernández, fueron localizados en un inmueble ubicado sobre un camino de terracería, entre La Ceiba y Unión Progreso en el municipio de Santiago Sochiapan, Veracruz.
Fue el pasado 8 de octubre de 2024 cuando se reportó la desaparición de la activista y su esposo. Tras la ejecución de una orden de cateo, la Fiscalía General del Estado de Oaxaca (FGEO) confirmó el hallazgo de dos fosas clandestinas donde se encontraban los restos.
La FGEO encabezó la investigación junto con la Coordinación Nacional Antisecuestro (Conase), el Centro Nacional de Inteligencia, la Guardia Nacional y la Secretaría de la Defensa Nacional, quienes señalaron a integrantes de células delictivas que operan en la región como posibles responsables.
Además, la Fiscalía aseguró que continúa la investigación para dar con más personas involucradas.