El estado de California presentó una demanda contra el presidente de Estados Unidos (EE.UU.), Donald Trump, ante una corte federal, en ella solicitó la declaración de ilegalidad de los aranceles que impuso el gobierno estadounidense.
Gavin Newsom, gobernador de California, anunció el miércoles pasado que el estado lleva el caso a los tribunales para oponerse a los gravámenes de Trump. Esta decisión marca la acción más firme hasta la fecha frente a una política comercial que causó turbulencias en los mercados internacionales.
Según Newsom, estas medidas constituyen el “peor autogol” en la historia de EE.UU. y las considera una de las decisiones más “autodestructivas” que haya tomado el país.
El gobernador advirtió que, con este panorama comercial, California enfrenta la pérdida de miles de millones de dólares en ingresos.
Por último, el gobernador destacó que California, con 39 millones de habitantes, se mantiene como el estado más poblado del país y aporta el 14 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) de Estados Unidos, cuya economía muestra una fuerte dependencia de las relaciones comerciales con México, Canadá y China, países que figuran entre los principales objetivos en la actual guerra arancelaria impulsada por Trump.