A través de la frontera San Diego-Tijuana, el gobierno de Estados Unidos entregó a las autoridades mexicanas al exgobernador de Tamaulipas, Tomás Yarrington Ruvalcaba, acusado de delitos como lavado de dinero, delincuencia organizada y vínculos con el crimen organizado.
El exmandatario gobernó Tamaulipas de 1999 a 2004 y fue arrestado en 2017 en Florencia, Italia, un año después, en 2018, fue extraditado a Estados Unidos; para 2021, Yarrington se declaró culpable de aceptar sobornos millonarios de organizaciones criminales para facilitar sus operaciones durante su tiempo en el servicio público.
Por el anterior delito, Tomás Yarrington fue sentenciado a nueve años de prisión, pero obtuvo una liberación anticipada en julio de 2024; sin embargo, la Fiscalía General de la República (FGR) había solicitado su extradición para que respondiera ante la justicia mexicana.
Con su llegada a México, se espera que Yarrington sea puesto a disposición de un juez federal y trasladado a un centro penitenciario mientras continúan los procesos en su contra.