“El pronóstico indica que se producirán inundaciones repentinas extensas, poco frecuentes y, en ocasiones, catastróficas… Los niveles de agua de las inundaciones repentinas podrían alcanzar zonas que rara vez o nunca se han inundado”, manifestó el Servicio Meteorológico Nacional en Little Rock, Arkansas, tras la alerta de tornado que emitió el gobierno de Estados Unidos (EE. UU.) para algunas comunidades de siete estados.
Eran las 15:00 horas del centro de EE. UU. del 2 de abril cuando las autoridades emitieron la alerta de tornado para más de 15 millones de personas, situación que calificó como “potencialmente peligrosa”.
La alerta se mantuvo durante la madrugada de este jueves 3 de abril, principalmente para más de cinco millones de personas de Tennessee, Mississippi y Alabama.
Asimismo, las autoridades reportaron que las lluvias torrenciales han destruido viviendas y granjas en Missouri, Oklahoma y Arkansas; además, en Indiana los vientos alcanzaron los 128 km/h.
Por otro lado, los daños causados por tornados de categoría EF-1 se produjeron en los alrededores de Owasso, Oklahoma, Potosí y Nevada.
Se espera que las tormentas eléctricas dejen lluvias torrenciales en partes de los valles de Mississippi y Ohio; además, aclararon que será la primera de muchas rondas de lluvias intensas que se avecinan en la región.
Por último, indicaron que el cambio climático aumenta la probabilidad de lluvias extremas. Ha intensificado las precipitaciones por hora en casi el 90 por ciento de las grandes ciudades de EE.UU. desde 1970, según un análisis reciente.