El actual contexto de inestabilidad política a nivel global impactará negativamente la inversión empresarial, el crecimiento global y otros componentes económicos, según la consultora financiera Oxford Economics.

En su más reciente informe, la firma consultora británica planteó cuatro escenarios sobre los impactos en la tendencia de inversión del sector privado y el crecimiento económico derivado del ambiente político incierto, en gran medida, impulsado por la guerra arancelaria del presidente estadounidense Donald Trump.

Estados Unidos ya aplicó aranceles adicionales del 10 por ciento a los productos de origen chino y tasas del 25 por ciento al acero y aluminio importados. Se prevé que el próximo 2 de abril ponga en marcha tarifas del 25 por ciento a México y Canadá, sus principales socios comerciales.

Ante este panorama, Oxford Economics planteó como primer escenario una eventual disminución de la volatilidad política. Según la consultora, este entorno se mantendrá hasta mediados de año, pero sólo se materializaría si las amenazas arancelarias de Trump se reajustaran al alza durante varios meses para después estabilizarse y permanecer sin cambios.

Como segundo supuesto, la firma proyectó que la incertidumbre se mantendrá elevada, aunque descendería gradualmente hasta niveles de 2023. En este escenario, la inversión quedaría por debajo de su nivel base en 2026 y 2027, con una caída económica aproximada del 10 por ciento en Estados Unidos y China, seis por ciento en Europa y de entre cuatro y cinco por ciento en Reino Unido.

En su tercer escenario, estimó que la inestabilidad se reducirá gradualmente hasta niveles de 2018, pero se mantendrá relativamente alta, con una caída de la inversión hasta su nivel base en 2026 y 2027, sin posibilidades de una posterior recuperación.

El cuarto y último panorama esperado por Oxford plantea que la incertidumbre no ceda y se mantenga hasta finales de 2029, en concordancia con la tendencia del pasado mes de febrero, es decir, con imposiciones y anulaciones arancelarias sin previo aviso.

En este sentido, Michael Saunders y Daniel Harenberg, autores del reporte de Oxford, señalaron que, si la inestabilidad política se mantiene en niveles elevados, se podría reducir hasta un 20 por ciento la inversión en los países antes mencionados, por lo que “para evitar un crecimiento mundial débil y prolongado, probablemente será necesaria una corrección de rumbo”, es decir, un apoyo importante de las políticas monetarias y fiscales.