Bélgica, Países Bajos, Alemania, Reino Unido, Francia y Luxemburgo retiraron productos de la embotelladora europea de la Coca-Cola debido a que se identificó que contenían una alta concentración de clorato.
La embotelladora europea de Coca-Cola en Bélgica anunció que retiró del mercado las latas y botellas de cristal retornables de sus refrescos Coca-Cola, Sprite, Fanta, Fuze Tea, Minute Maid, Nalu, Royal Bliss y Tropico, en los países antes mencionados.
"No tenemos cifras exactas, pero está claro que se trata de una cantidad considerable (…). La mayoría de productos concernidos e invendidos ya fueron retirados de los comercios y seguimos tomando medidas para retirar los productos que quedan en el mercado", señaló a la agencia AFP la Coca-Cola Europacific Partners Belgium.
El clorato es un compuesto derivado del ácido clórico. Está considerado como un contaminante alimenticio y puede aparecer debido al uso de aguas tratadas con cloro durante la producción de alimentos, un proceso común en la desinfección de productos vegetales y en dicha industria.
La Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA) estimó que una exposición a largo plazo al clorato en los alimentos podía causar posibles problemas de salud a los menores, especialmente a los niños que carecen de yodo.
Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades informaron que el clorato puede causar irritación en la nariz, la garganta y los pulmones si se respira; irritación en la boca, el esófago o el estómago si se ingiere, o falta de aire u otros problemas respiratorios, ya que afecta a las sustancias en la sangre encargadas de transportar el oxígeno.