La noche del pasado miércoles 29 de enero un avión comercial de American Airlines, que transportaba 60 pasajeros y cuatro tripulantes, chocó contra un helicóptero militar Black Hawk, con tres soldados del ejército a bordo, cerca del Aeropuerto Nacional Ronald Reagan de Washington DC; ambas aeronaves cayeron a río Potomac. 

Información proporcionada por la Administración Federal de Aviación de Estados Unidos, indicó que el avión regional Bombardier CRH700 chocó con el helicóptero cuando se acercaba a la pista alrededor de las 21:00 horas. 

Por su parte, el vuelo 5342 de American Airlines cubría la ruta de Wichita, Kansas, a Washington DC, al momento de la colisión. 

Horas más tarde el presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, emitió un mensaje oficial desde la Casa Blanca, confirmado que no hay sobrevivientes de este accidente aéreo. 

Previamente, en una rueda de prensa el jefe de Departamento de Bomberos y Servicios de Emergencia en Washington DC, John Donnelly, refirió que se habían recuperado 27 cuerpos del avión y uno del helicóptero, por lo que las tareas de rescate pasaron a ser una operación de recuperación de cuerpos. 

Medios estadounidenses informaron que entre los pasajeros del vuelo comercial se encontraban los patinadores Spencer Lane, Gina Khan, Edward Zhou, las hermanas Everly y Alydia Livingston, Franco Aparicio, Sean Kay y Angela Yang y otros miembros de la Federación de Patinaje Artístico de la Unión Americana, quienes regresaban de un campamento de formación.

Finalmente, el portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov, confirmó la presencia de los patinadores y entrenadores rusos: Vadim Naumov, Yevgenia Shishkova, Inna Volyanskaya y otro miembro cuyo nombre no se ha revelado.