Ante el temor de ser víctimas de la delincuencia organizada, misma que sigue atemorizando a la población en la zona de los Altos de Chiapas, habitantes de las etnias Tzotzil y Tzeltal marcharon el pasado domingo 12 de enero en el municipio de Chenalhó, para exigir seguridad y justicia por el asesinato del padre Marcelo Pérez, ocurrido hace tres meses.
Asimismo, los manifestantes exigieron a las autoridades que se investigue el homicidio de dos jóvenes la noche del 11 de enero en la cabecera municipal de San Cristóbal de las Casas.
Los afectados piden al Gobierno Federal, encabezado por la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo, que participe en el desarme de los grupos armados y que frene a la delincuencia organizada que los ha desplazado durante varios años.
Durante la movilización, insistieron que cientos de familias no han podido regresar a sus comunidades debido a las amenazas constantes de grupos delictivos que operan en la región, queman viviendas y obligan a las personas a abandonar sus propiedades.
Finalmente, urgieron a las autoridades a que apliquen una estrategia que les regrese la seguridad en todas las comunidades, mismas en las que se está disputando el territorio para continuar con delitos como el tráfico de drogas, trata de personas y extorsión, por mencionar algunos.