La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, aprovechó su discurso por los 100 días de su Gobierno para arremeter contra la expansión de las economías y comercio de los países asiáticos en el Continente Americano.

La mandataria resaltó “la buena relación” de Donald Trump, en su primer mandato presidencial, con el expresidente mexicano Andrés Manuel López Obrador para firmar el Tratado de Libre Comercio entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC).

Sheinbaum agradeció “la sustitución de importaciones y la creación de empleo en las tres naciones. Desde esa firma se concibió que esa era la única opción para enfrentar con éxito la competencia que significa el avance económico y comercial de países asiáticos”.

La presidenta aseguró a Trump, a días de regresar a la Casa Blanca, una “buena” relación y de “respeto”, sin embargo, recordó que México es un país “libre, independiente y soberano” y no habrá “subordinación”.

Tras ganar las elecciones, Trump amenazó a México con imponer aranceles comerciales a los productos que ingresen a su país a partir de su nueva administración si las autoridades mexicanas no frenaban el flujo de migrantes, fentanilo y las inversiones chinas.

En consecuencia, la Secretaría de Economía clausuró zonas de comercio de productos de origen chino en la Ciudad de México, como el caso de Izazaga 89, para cumplir con las condiciones del presidente electo de EE.UU.